Se encuentra en nuestro país el 14º. Dalai Lama, tibetano mundialmente conocido por su filosofía pacifista y ganador del Premio Nobel de la Paz en 1989. Sus seguidores le llaman también El Sagrado, Suave Gloria, Poderoso en la Palabra, Puro de Mente, Divinamente Sabio, Recipiente de la Fe y Ancho como el Océano, y los tibetanos en el exilio lo nombran Kundu que significa ?la paciencia?. Líder religioso de una de las escuelas budistas del Tíbet -pero no de todos los budistas de las diferentes escuelas-, y actualmente líder político en el exilio, Tenzin Gyatzo nació el seis de julio de 1935 en el poblado de Takster situado en el noreste del Tíbet.
En el año 641 de nuestra era se introduce el budismo en el Tíbet. El 1er. Dalai Lama nace en 1391 y se le consideró como el Buda de la Compasión que escogió renacer en el mundo para servir a la humanidad y a su muerte se buscó un continuador, y así sucesivamente hasta el actual líder espiritual. Al morir el 13º. Dalai Lama, los monjes reconocieron a Tenzin Gyatzo, quien contaba con dos años de edad, como la ?reencarnación? de su predecesor, siendo llevado a Lhasa, la capital del Tíbet, para recibir una intensa educación religiosa.
Al ser invadidos por China en el año de 1950, el Dalai Lama asumió también el control político del Estado. En 1954 viajó a Pekín a entrevistarse con Mao sin ninguna respuesta positiva, y en 1956 se trasladó a la India para solicitar apoyo, encontrando buena acogida del Primer Ministro de ese país. En 1959, los habitantes de la capital de Lhasa se sublevaron de la dominación china para reafirmar su independencia siendo reprimidos con violencia y poderío, por lo que el 14º. Dalai Lama tuvo que abandonar el Tíbet acompañado de 100 mil refugiados, cruzando los Himalayas con muchas penalidades hasta llegar a la India donde recibió asilo político.
Desde 1960 reside en Dharamsala a los pies del Himalaya, actualmente conocida como la ?pequeña Lhasa? y considerada como Capital en el Exilio. Desde entonces inició una lucha pacífica de tipo ?oral? ante la ONU y numerosos fotos internacionales de derechos humanos y a la fecha los más importantes líderes mundiales han insistido en que el gobierno de China termine con más de 40 años de opresión política, religiosa y cultural en el Tíbet.
Ha realizado numerosos viajes a lo largo del mundo hablando en forma elocuente a favor de una comprensión ecuménica de la bondad, la compasión, el respeto al medio ambiente y la búsqueda de la paz mundial. En 1989 visitó por primera vez a nuestro país y actualmente viene a traer un mensaje de paz y esperanza y expresar su ética para el nuevo milenio, que consiste en encontrar caminos para disfrutar de la armonía y tranquilidad, beneficiándose plenamente de los logros científicos y técnicos modernos.
Creemos que en esta época de violencia física y moral que ha logrado introducirse hasta la médula de las instituciones creando situaciones de injusticia, una figura relevante como la del Dalai Lama predicando la paz, la armonía y el respeto al ser humano, siempre será bien recibida en cualquier país del mundo... ¡Bienvenido!...
