Entre los seres vivos más desarrollados se producen distintas formas de comunicación, los sonidos, movimientos y actitudes son comunes en el reino animal, sólo el hombre posee un lenguaje complicado verbal y escrito para comunicar a sus semejantes ideas, emociones e intenciones, la comunicación es fundamental sobre todo en seres gregarios que necesitan conocer los impulsos de los demás para reaccionar de la forma más adecuada de acuerdo a la programación biológica heredada.
Entre los animales la comunicación permite la convivencia social y el trabajo en equipo aumentando de esta manera las posibilidades de sobrevivencia y fuerza del grupo, entre primates no humanos y los lobos existen formas complicadas de comunicación que han sido estudiadas por biólogos y los etólogos intentan correlacionarlas con la manera de reaccionar en los humanos, existen formas de comunicación en nuestra especie que tienen sus raíces en los instintos y es indudable su origen genético, la mayor parte de la comunicación incluso humana es sólo del lenguaje escrito o hablado sino por medio de gesticulaciones y posiciones corporales comunes en otros miembros del reino animal, por ejemplo la agresividad que amenaza destructividad se comunica con el impulso a dar la imagen de mayor estatura y volumen del cuerpo, el instinto de observar en los pavos, en los perros y gatos con el despliegue del plumaje o la curvatura del cuerpo y los pelos erizados, en el hombre el ponerse de pie y el colocar los puños en la cintura con brazo y antebrazo formando ángulo también busca este objetivo de asustar al contrincante, el buscar la mirada en forma directa también implica agresividad y el evitarla sumisión, la gesticulación del rostro manda múltiples mensajes de agresividad, sumisión, desprecio, amor, atracción, conciliación, etc.
La comunicación humana se hace rica y compleja con el lenguaje ya que además de emociones se transmiten conocimientos, deseos, pensamientos y fantasías, sin embargo el habla se encuentra con inflexiones del sonido que también muestran emociones e impulsos, sin embargo estos moldes universales que dan significado emocional a las palabras pueden llagar a engañar, el tono de voz y las expresiones usadas tiene que ver con la personalidad natural de cada quien, es común que al escuchar la voz a un volumen alto y determinante se tenga la impresión de agresividad cuando en realidad puede estar sólo una convicción firme y apasionada pero no el impulso a dominar o hacer daño, sucede también que palabras aparentemente tranquilas y conciliadoras escondan intenciones de controlar abusivamente a los otros o de dañar.
La comunicación emotiva ha de diferenciarse de la misma emotividad pues no necesariamente existen en forma paralela, vemos personas muy expresivas y poco emotivas así como las encontramos muy emotivas con poca expresividad, esto puede confundir, existe una creencia generalizada de que los hombres somos menos emotivos porque expresamos menos, las mujeres se consideran más emotivas debido a su mayor expresividad pero lo que se aparenta no siempre muestra la realidad.
La forma de comunicar conocimientos, deseos y pensamientos por medio de los símbolos que forman el lenguaje oral o escrito depende de la capacidad intelectual, conocimientos, emotividad y personalidad de quien lo hace, el pensamiento que se encuentra atrás de la comunicación puede ser descriptivo o sintético existiendo entre los dos polos puntos intermedios, la comunicación descriptiva se ocupa más de dar información extensa y detallada de la realidad y poco de sacar conclusiones de ella, el pensamiento sintético en forma automática recoge la información básica necesaria para entender el porqué y las consecuencias de la realidad observada, cuando dos personas colocadas cerca de estos polos interactúan es frecuente que se presente incomodidad en ambos, la analítica acusa de agresivo, descortés y dominante al sintético y este último de superficial y verborreica (que habla mucho) a la primera, el error no es de comunicación sino de intolerancia a lo comunicado.
Cuando escucho que existe mala comunicación entre las personas generalmente han usado mal la expresión ya que en realidad lo que existe es intolerancia, agresividad y emociones inadecuadas, el silencio por ejemplo puede expresar desconfianza, desprecio y agresividad, cuando el volumen de la voz es anormalmente alto generalmente muestra ira y puede ser el preludio de la destructividad psicológica o física, los errores aparecen cuando se interpretan mal los estímulos por no tomar en cuenta la personalidad sana de cada quien.
La confianza en la buena intención de los demás es producto de la seguridad adquirida y de la experiencia real que tengamos de los otros, con ella la comunicación es fácil y espontánea, pero cuando los demás han mostrado crónicamente destructividad, poco entendimiento, ira u otras emociones o impulsos dañinos es natural que exista un estado de alerta y desconfianza bloqueando de esta manera la comunicación, cuando la desconfianza aparece sin razonable explicación el origen se encuentra en el sentimiento de inferioridad, ansiedad y depresión neuróticas causada por una debilidad natural combinada con un ambiente que no fue propicio para el crecimiento y desarrollo, la comunicación entonces es muy difícil debido a la hipersensibilidad emocional que los lleva a interpretar como ofensas y agresiones opiniones que no satisfacen su generalmente equivocada forma de ver la realidad.
La comunicación de las emociones y el conocimiento de nuestros padres, maestros y demás personas nos moldearon y moldean activando el potencial que heredamos, también puede deformarnos cuando lo que nos comunican son mentiras y las emociones que los mueven son insanas.