PUEBLA, PUEBLA.- La falta de contundencia del chileno Luis Ignacio Quinteros privó a Puebla de regresar al camino de la victoria, y se tuvo que conformar con el empate 1-1 frente a Tuzos del Pachuca, en partido de la fecha 14 del Campeonato Apertura 2004.
Quinteros adelantó a Puebla en el marcador, al minuto 72, pero el argentino Diego Rivero emparejó los cartones al 79. al inicio del encuentro en el minuto cuatro, Sergio Santana falló un penal por parte del cuadro visitante.
Con este empate, Puebla llegó a 20 puntos dentro del Grupo Dos, en tanto Pachuca suma 26 en el tercer sector.
De haber concretado la oportunidad que se le presentó desde el manchón penal apenas al minuto cuatro al Pachuca, la historia de este partido habría sido muy distinta.
Una clara falta de Raúl Alpizar sobre el argentino Diego Rivero fue decretada como penal por el silbante Marco Rodríguez, una inmejorable oportunidad para que Pachuca se fuera arriba en el marcador.
Sin embargo, Santana anunció mucho su disparo, además de darle poca fuerza para que el guardameta Oscar Dautt se tendiera cuan largo es sobre su lado izquierdo, para devolverle la vida a Puebla.
La falla de Pachuca no afectó su estado anímico ni futbolístico, al contrario, se adueñaron del balón y del terreno de juego ante un Puebla que no es ni la sombra del equipo que se mantuvo invicto las primeras nueve fechas.
Dautt se erigió como la figura de su equipo en la primera parte, al salvar nuevamente su meta al minuto 25, luego de un cabezazo de Rodrigo López que parecía el primer tanto del partido.
Pero si Dautt fue factor para Puebla, el guardameta colombiano Miguel Calero también ayudó a los hidalguenses, pues a dos minutos del descanso rechazó con el pie un disparo del argentino nacionalizado mexicano Gabriel Caballero que llevaba dirección de gol, tras una excelente jugada del chileno Ignacio Quinteros.
Este arribo de Puebla sólo fue un aviso de lo que serían los segundos 45 minutos, los cuales estuvieron completamente inclinados del lado de los ?Camoteros?, que se adueñaron de las acciones frente a un Pachuca que parece olvidó en el vestidor el futbol y la actitud que había mostrado.
Quinteros, que al minuto 67 perdió un mano a mano con Calero por adelantar mucho el esférico, parecía erigirse como el gran héroe al conseguir el primer gol del partido, al minuto 72.
La jugada del gol se originó en un tiro de esquina por el sector de la derecha que Oscar Mascorro alcanzó a ?peinar?; el esférico le llegó a Quinteros, quien muy bien controló con el pecho para conectar de zurda un potente disparo imparable para Calero.
Al 78, el ariete andino dejó escapar de manera increíble el segundo gol en un grave error de Calero, que le regaló el balón a Quinteros y este, con todo el marco abierto, envió su disparo a un lado, una jugada que tuvo graves repercusiones en el marcador, pues un minuto después Pachuca emparejó los cartones.
Puebla no sólo falló adelante, también atrás cometió una grave equivocación que le permitió a Tuzos empatar el marcador en un tiro libre, sólo un minuto después de la falla del chileno.
Mientras los jugadores locales discutían con el silbante, Pachuca ?madrugó? en el tiro libre y cedió el esférico para Rivero, quien en el borde del área conectó un sólido disparo que dejó parado a Dautt.
Puebla, a ocho minutos del final, pudo haberse llevado el triunfo, sin embargo, para cerrar las clases de cómo no se debe definir frente al marco rival, se hizo presente el colombiano Frankie Oviedo.
Oviedo tuvo en sus pies el tanto de la victoria, a la entrada del área chica de frente a la portería, y ya sin portero, empalmó muy arriba el esférico y lo envió por encima del larguero, para así dejar escapar dos puntos muy importantes en la lucha por el no descenso que mantienen los de la ?Angelópolis?.
El arbitraje estuvo a cargo de Marco Antonio Rodríguez, quien expulsó de doble tarjeta amarilla al argentino Diego Rivero (91), y amonestó a Francisco Gabriel de Anda (51) por Pachuca. En tanto Omar Avilán (45), Felipe Ayala (52) y Sigifredo Mercado (76) vieron cartón preventivo por Puebla.