EFE
BRUSELAS, BÉLGICA.- Un grupo terrorista podría fabricar una bomba nuclear rudimentaria en menos de cuatro semanas si se apodera de la materia prima, según un simulacro realizado por un grupo internacional contrario a la proliferación de armas de destrucción masiva.
El grupo presentó ayer, las conclusiones de un simulacro de atentado con bomba atómica contra la sede de la OTAN en Bruselas.
Al ejercicio virtual, bautizado “Negro Amanecer”, asistieron destacados representantes y expertos de la Unión Europea (UE), la OTAN, el Gobierno estadounidense y el Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA).
El simulacro fue organizado por el Centro de Estudios Internacionales y Estratégicos (CSIS) y patrocinado por el Proyecto de Refuerzo del Partenariado Global, un consorcio de 21 instituciones de investigación en 16 países, así como por la Iniciativa sobre la Amenaza Nuclear (NTI), una organización que intenta reducir la amenaza de las armas de destrucción masiva.
Entre los participantes figuraron el Alto Representante de la UE, Javier Solana; el director adjunto de Europol, Mariano Simancas; el jefe del departamento de Control sobre las Exportaciones Europeas del Instituto Nacional para Investigaciones sobre la Paz en Estocolmo, Ian Anthony; el ex senador estadounidense Sam Nunn, y el presidente del Instituto Internacional de Investigación de la Paz en Estocolmo, Rolf Ekeus.
Los representantes y expertos han evaluado la amenaza del terrorismo con armas de destrucción masiva y desarrollado acciones para prevenir un ataque con armas biológicas, nucleares o químicas.
Previamente, asistieron a la proyección del simulacro “Negro Amanecer”, basado en algunas situaciones reales, en el que los terroristas hacen explotar cerca de la sede central de la OTAN una bomba nuclear rudimentaria, con uranio enriquecido robado en reactores europeos de investigación civil.
Rolf Ekeus dijo en rueda de prensa que “Europa es el vivero ideal para acciones terroristas, ya que tiene muchos objetivos simbólicos y políticamente sensibles”.
Según Ekeus, “es cada más fácil hacerse con material nuclear y con las técnicas y la información para construir armas de destrucción masiva”.
“Aparte de que hace falta muy poco material para construir una bomba nuclear, es difícil detectarlo o interceptarlo durante su transporte”, añadió Anthony.
Por eso, los participantes de “Negro Amanecer” llegaron a la conclusión de que lo más urgente es la coordinación internacional para prevenir este tipo de ataques.
El ex senador estadounidense Sam Nunn dijo que “es importante asegurarnos que los terroristas no consigan apoderarse de las armas y los materiales existentes, sobre todo en Rusia, ya que es muy difícil trazar y recuperarlos una vez que estén robados”.