A través de un sondeo, los torreonenses criticaron la pretensión de convertir la avenida en un circuito deportivo.
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Existe un marcado rechazo de los automovilistas a la idea de cerrar los accesos por la avenida Central de la colonia Torreón Jardín, debido a que no es una arteria de uso exclusivo de quienes habitan en este sector, sino una de las más importantes vialidades alternas para evitar aquéllas que ya registran serios congestionamientos.
A través de un sondeo, los torreonenses criticaron la pretensión de convertir la avenida en un circuito deportivo, pues según opinaron, si existe la necesidad de contar con más parques deberían crearse otros sin tener que prescindir de una vialidad.
Alejandra Pérez Serna consideró que no sería conveniente que la avenida Central únicamente quedara con dos accesos y cerrar todo el resto, puesto que casi todas las calles que la cruzan, forman parte de la colonia y la atraviesan de un extremo a otro, lo cual facilita una rápida circulación.
Refirió que en todo caso, deberían construirse otras áreas verdes de las que los colonos puedan hacer uso.
Carlos Uribe dijo por su parte que la avenida Central se ha convertido en una de las vías alternas para quienes tienen la necesidad de transitar por la colonia Torreón Jardín y sus alrededores, debido a que otras principales como el Paseo de la Rosita o la calzada Lázaro Cárdenas, registran congestiona-mientos la mayor parte del día.
Mientras se mantenía a la espera de la hora de salida de sus hijos, en un colegio localizado en el interior de la colonia, manifestó que regularmente él circula por la avenida Central porque las otras vialidades mencionadas están saturadas y se han vuelto muy peligrosas por el constante paso de automóviles y camiones.
“Aquí sin embargo circulas con toda tranquilidad y de manera muy segura”.
Su esposa, Mayra Vianey Olivas, consideró que ojalá que las autoridades municipales reconsideren su postura y no lleven a cabo dichas medidas, pues se causarán serios trastornos a la vialidad de los alrededores, principalmente en las afueras de los planteles educativos que se localizan en Torreón Jardín.
Dijo que si los habitantes de la colonia están demandando mayores espacios recreativos, debería hacerse lo posible por mejorar el parque Las Ranas, localizado junto al lienzo charro y el cual está seriamente descuidado.
De oficio taxista, José Luis Unzueta manifestó que al igual que miles de personas que realizan esta actividad, “voy a batallar más porque tendré que rodear mucho para entrar a la colonia”.
Refirió que todos los días tiene la necesidad de transitar por Torreón Jardín mientras trabaja, aunque hacerlo por la avenida Central le acorta distancias desde la colonia Eduardo Guerra.
DEFIENDE PROYECTO
El alcalde, Guillermo Anaya, afirmó que es sólo un paseo deportivo y no un fraccionamiento exclusivo lo que se pretende crear en la colonia Torreón Jardín.
*Aclara que no se proyecta cerrar los accesos a la colonia Torreón Jardín y precisa que únicamente se unirá una parte del paseo Central con la Laguna Norte y Laguna Sur a fin de crear un circuito interno.
*Dice que hay imprecisiones en las declaraciones del presidente del Consejo Consultivo de Vialidad, Héctor Aguirre Sarabia, quien habló de que sólo se dejarán dos entradas y salidas a la colonia, una a la altura de la calle Jesús María del Bosque y otra en el Paseo la Rosita cerca de Sicomoros.
*Tal vez se deriva de que efectivamente, “desconocen el proyecto que sólo tiende a mejorar urbanísticamente el sector residencial.
*Explica que no fue una decisión unilateral, sino que se proyectó en Desarrollo Urbano la unión del paseo Central con La Laguna Norte y Laguna Sur, a efecto de crear un paseo de esta naturaleza que de ninguna manera perjudica el entorno urbano y mucho menos generará caos viales.
*Destaca que son buenos los objetivos que se persiguen con este proyecto y no es para beneficiar a la zona de referencia por ser residencial, sino porque en realidad, no implica una inversión importante y mejorará el sector de manera integral, a lo cual los ciudadanos que lo habitan, tienen derecho.
FUENTE:Investigación El Siglo de Torreón