El gobierno de Francia negó acusaciones de que políticos y empresarios franceses recibieron sobornos de parte de Saddam Hussein.
07 de octubre 2004.
París (EFE).-Las acusaciones son parte del informe presentado por Charles Duelfer.
El gobierno de Francia negó acusaciones de que políticos y empresarios franceses recibieron sobornos de parte del ex presidente de Irak, Saddam Hussein.
Las imputaciones fueron hechas en el informe presentado este miércoles ante el Congreso estadounidense, que confirmó que Irak no poseía armas de destrucción masiva al momento de la invasión anglo-estadounidense.
"Es importante estudiar las acusaciones, porque hasta donde nosotros entendemos no han sido verificadas ni con las personas ni con los países afectados", dijo el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores francés Herve Ladsous.
El documento nombra a individuos y organizaciones, particularmente de los países permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, a quienes supuestamente Hussein habría ofrecido petróleo barato en un intento por lograr el levantamiento de las sanciones que afectaban a Irak desde agosto de 1990.
Por verificar acusaciones
Las acusaciones de corrupción contra franceses y otras personalidades extranjeras formuladas por el asesor de la CIA e inspector de EU sobre el armamento iraquí, Charles Duelfer, "no han sido verificadas ni con los interesados ni con las autoridades", afirmó hoy el Ministerio galo de Exteriores.
En su informe, el también ex inspector de la ONU para el desarme de Irak incluye al ex ministro francés del Interior Charles Pasqua, entre los que supuestamente recibieron sobornos del entonces régimen de Saddam Hussein, entre 1996 y 2003, en el marco del programa humanitario "petróleo por alimentos".
El portavoz de Exteriores, Hervé Ladsous, afirmó que habrá que "cerciorarse con mucha precisión sobre la veracidad de estas informaciones, en la medida en que entendemos que estas acusaciones contra empresas e individuos no han sido verificadas ni con los interesados ni con las autoridades de los países concernidos".
Según Duelfer, Sadam Husein obtuvo unos 11 mil millones de dólares mediante métodos no aprobados por la ONU, como contratos directos con gobiernos y compañías, así como con el cobro de comisiones en la venta de petróleo.
En el listado divulgado por la CIA de personas que pudieron beneficiarse del sobreprecio cobrado por la venta de petróleo, aparecen, además de Pasqua, el director del programa humanitario de la ONU Benon Sevan; el presidente libanés Emile Lahoud; el líder nacionalista ruso Vladimir Zhirinovsky, y la presidenta de Indonesia, Megawati Sukarnoputri.
Según la operación descrita, estas personas podrían haber recibido lotes de petróleo iraquí para venderlo como intermediarios, con un sobreprecio.
El informe alega que, en sus intentos de corrupción, los servicios secretos de Sadam Husein se interesaron especialmente por franceses y rusos, ya que sendos países son miembros permanentes (con derecho de veto) del Consejo de Seguridad de la ONU.