EFE
ESTRASBURGO, FRANCIA.- El presidente colombiano Álvaro Uribe fue recibido con apoyos y aplausos, por unos, y duras críticas por otros, en el Parlamento Europeo (PE), donde expuso ante el pleno y ante la comisión de Exteriores su política de seguridad.
“Enfrentar a 30 mil terroristas no es tarea fácil y ¿qué país puede conformarse con dos mil 200 secuestros en un año?”, se preguntó Uribe ante la sesión plenaria de la Eurocámara en la que citó datos concretos de secuestros, asesinatos o atentados.
Desde su llegada a la presidencia del Gobierno, dijo, han mejorado esos datos pero “la tarea apenas empieza” y “he asignado prioridad a la seguridad democrática porque creo que hará entender a los violentos la necesidad de negociar con seriedad”.
Antes de pronunciar su discurso, Uribe fue presentado por el presidente del PE, Pat Cox, con una breve exposición en la que mostró la voluntad de la Eurocámara para apoyar todos los esfuerzos del Gobierno colombiano en su lucha contra el terrorismo y el narcotráfico.
Eurodiputados del grupo popular (PPE) y muchos de los del socialista (PSE) siguieron con atención su discurso, interrumpido incluso con aplausos por algunos de sus representantes.
El popular español José Ignacio Salafranca, declaró que para el PPE, que es el grupo mayoritario en la Eurocámara, “Uribe es una persona valerosa, que se juega a diario la vida en defensa de la paz” y “hoy ha demostrado ser un ejemplo de tolerancia y de diálogo”.
Sin embargo, los representantes de Izquierda Unitaria, los Verdes y Liberales asistieron a la presentación pero lo hicieron portando unas bufandas blancas con el lema “Paz y Justicia en Colombia” y, en cuanto tomó la palabra Uribe, abandonaron el hemiciclo en señal de protesta por su visita y por la situación de derechos humanos en su país.
A estos últimos se dirigió el Presidente en rueda de prensa posterior a su comparecencia en el pleno para pedirles que no eludan un debate con él y para decirles que “les espero” en la comisión de Exteriores de la Eurocámara, donde esta tarde se ha sometido a un duro interrogatorio, por parte de los parlamentarios que la integran.
Uribe no olvidó, ni ante el pleno ni en la rueda de prensa, a las familias de las víctimas del conflicto colombiano y, sobre todo, a los más de mil secuestrados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), al expresar su total comprensión por su “angustia y tristeza”.
Sin embargo, algunos de los familiares comparecieron ante la prensa junto a representantes políticos y de organizaciones sociales y sindicales, para acusarle de facilitar la inmunidad de los paramilitares y de “combatir la guerra con más guerra”.
Yolanda Pulecio y Melanie Delloye, madre e hija respectivamente, de la ex candidata presidencial colombiana que permanece secuestrada por las FARC desde hace dos años, Ingrid Betancourt, criticaron la política de Uribe de “reinsertar a los culpables” y pidieron al PE una “mirada vigilante sobre lo que ocurre en Colombia”.
La visita de Uribe al PE se produjo después de un desayuno de trabajo en Bruselas con el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, y con los comisarios de Exteriores Chris Patten, y de Comercio, Pascal Lamy, con quienes discutió cuestiones políticas y comerciales.
Bruselas y Estrasburgo han sido la primera etapa de su gira oficial por Europa, que le llevará además a Italia, el Vaticano y Alemania.