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México, DF.- La Cámara de Diputados analiza una reforma al Código Penal Federal para castigar como delito grave a quien clone o falsifique tarjetas de crédito, débito o cheques, al imponer cárcel de tres a nueve años a quien se dedique esa actividad.
A propuesta de diversos bancos y de la Comisión Nacional de Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), diputados del PAN presentaron la reforma que busca inhibir el crecimiento de este delito que tan sólo en el 2003 provocó pérdidas a la banca y cuentahabientes por un monto de 700 millones de pesos.
En entrevista, el diputado del Partido Acción Nacional (PAN), Manuel Ignacio López Villarreal, presentó en la sesión ordinaria la iniciativa de reformas a la legislación a fin de que esta conducta se considere como delito grave, sin excepción alguna.
Con ello las autoridades federales podrán perseguir y castigar esta actividad criminal que lesiona al sistema bancario, a los usuarios de tarjetas, así como a los establecimientos comerciales, señaló.
El también presidente de la Comisión de Economía, dijo que hoy en día las tarjetas de crédito y de débito expedidas por el sistema bancario mexicano, se han convertido en un usual medio de pago y refirió que en el país existen más de 30 millones de tarjetahabientes.
Sin embargo, el uso frecuente de estos instrumentos de pago, aunado a una legislación obsoleta, ha ocasionado la creación de sofisticadas conductas delictivas con tarjetas como la falsificación, producción, reproducción, distribución y comercialización.
Refirió que durante 1997 a 1998, la defraudación con tarjetas de crédito y documentos de pago ascendió a más de 313 millones de pesos, afectando a más de 45 mil tarjetahabientes y más de 70 mil establecimientos; pero, en los últimos años, este fraude se ha duplicado.
Por su parte, Oscar Levín Coppel, el panista dijo que este delito va en aumento y enfatizó que la falsificación de tarjetas es el crimen con mayor incidencia en la banca mexicana.
Levín Coppel subrayó que la legislación federal debe contemplar claramente este tipo de delitos en todas sus modalidades, porque es muy común que las autoridades se vean en dificultades jurídicas al momento de pretender consignar algún sujeto que cometió este tipo de fraude.
La iniciativa pretende reformar la legislación federal contenida en el artículo 112 de la Ley de Instituciones de Crédito, para ampliar y señalar todas las conductas relativas a la falsificación de tarjetas y otros documentos de pago, añadió.
Comentó que tan sólo en el 2003 se recibieron un total de 58 mil 200 quejas de usuarios de tarjetas de crédito que fueron víctimas de fraude o clonación de tarjetas.
La forma más común de este fraude se da en restaurantes cuando se paga con una tarjeta de crédito o débito y es “clonada” o falsificada por parte de meseros y empleados bancarios.
