Empleados esperan jubilarse y pensionarse
Los choferes del transporte urbano de distintas líneas de servicio demandaron de sus patrones el registro ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Los más afectados resultaron ser los del Sindicato de Choferes de la CTM, que sólo tienen un seguro de vida y los del Sindicato de la Alianza indicaron que desde hace 15 años existe servicio médico en el gremio, pero también se requiere de esa prestación.
Al realizar un recorrido por el primer cuadro de la ciudad dentro de las primeras líneas de transporte urbano, se pudieron conocer las demandas de los trabajadores del volante.
Su principal preocupación es la de que sus patrones no los tienen asegurados ante el IMSS; por lo tanto, cuando se enferman ellos deben pagar su propia consulta, que suele ser sólo de médico general, de unos 150 pesos en promedio, además del medicamento por una enfermedad común, que oscila entre los 500 pesos por persona.
Cuando la atención médica la requieren más integrantes de la familia, la tarifa sube, con lo que se puede determinar que el monto para unas cuatro personas que padecen de la misma enfermedad, la cifra puede incrementarse hasta los dos mil pesos, si no hay complicaciones.
Los trabajadores del volante demandaron su registro ante el IMSS, ya que tras varios años de servicio esperarían con justicia jubilarse y pensionarse con cierta cantidad que les permita vivir, pero la realidad es otra.
En el recorrido que realizó El Siglo de Durango se entrevistó a Eugenio, quien dijo tener 28 años, que trabaja para la CTM y que solamente en este sindicato les manejan el seguro de vida y que no hay IMSS para ningún chofer. Dijo tener familia y que requiere servicio médico cuando se enferma, pues padece de los riñones.
Mariano, de 35 años, comentó que tiene cinco hijos y esposa. Lleva 14 años trabajando como chofer del transporte público y también afirmó que carece de inscripción ante el IMSS como lo estipula la ley. Indicó que el sindicato sólo lo ha apoyado con un seguro de vida y que cuando se enferman sus hijos debe desembolsar dinero para atender los padecimientos y que es un servicio demasiado caro.
Manuel, de 23 años, también explicó que sólo vive con su esposa y que como chofer ya tiene alrededor de cuatro años laborando. Negó estar registrado ante el IMSS, aunque sí dispone de seguro de vida, una de las prestaciones que le otorga el sindicato de la CTM, pero ahora que lleguen los hijos requerirá de servicios médicos. Indica que necesita la atención del IMSS.
Por otro lado, Miguel, de 53 años de edad, quien labora para el Sindicato de la Alianza, precisó que en este gremio sí se cuenta con un consultorio que otorga servicio a los choferes y sus familiares; sin embargo, el costo de la consulta es de 50 pesos y el medicamento es gratis. A pesar de esto, el chofer manifestó que es importante el IMSS, ya que con eso se cotiza para obtener una pensión cuando se da el retiro del empleo.
LIMITACIÓN
Sólo pagan salario
De acuerdo con el recorrido que realizó El Siglo de Durango en las distintas rutas urbanas del transporte público, las demandas de los choferes son unánimes: requieren del respaldo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); sin embargo, la costumbre de los patrones sólo consiste en pagarles su salario.
Los mismos choferes temen decir sus verdaderos nombres debido a las posibles represalias de sus patrones, por lo que exhortan a las autoridades del IMSS a que hagan lo conducente para que puedan ser apoyados con lo que corresponde a derecho, que es el Seguro Social, para ellos y sus familias.
