Reitera su rechazo a la retirada de las tropas españolas de Irak porque lo considera un signo de debilidad.
04 de mayo 2004.
Madrid, (EFE).- El ex presidente del Gobierno español José María Aznar presentó hoy en Madrid un libro sobre sus ocho años en el poder en el que reconoce, en relación con los atentados del 11 de marzo en Madrid, que "quizá los éxitos en la lucha contra ETA nos han llevado a bajar la guardia ante la amenaza fundamentalista".
El libro, "Ocho años de Gobierno" (1996-2004), editado por Planeta, fue presentado por Aznar en Madrid en un acto en el que estuvo respaldado por sus principales colaboradores y compañeros del Partido Popular (PP).
La obra la empezó a escribir hace ocho meses, pero incluye un epílogo en el que repasa los atentados del 11-M, que causaron 191 muertos al explotar varias bombas en cuatro trenes de Madrid, y la derrota del PP en las elecciones del 14 de marzo.
En ese epílogo, Aznar reitera nuevamente su rechazo a la retirada de las tropas españolas de Irak, ordenada hace quince días por el nuevo presidente del Gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, una decisión que a su juicio supone "un signo de debilidad" ante los terroristas.
También se defiende de las fuertes críticas recibidas dentro y fuera de España por la "gestión informativa" del 11-M, pero por primera vez deja entrever una autocrítica sobre la actuación del Gobierno en esta materia.
"Debo reconocer -escribe Aznar- que tal vez la opinión pública española no era lo suficientemente consciente, hasta el 11 de marzo, del alcance de la amenaza del terrorismo islámico, o por lo menos no tanto como lo ha sido de la amenaza del terrorismo de ETA".
"Si es así -añade-, el Gobierno tiene sin duda una responsabilidad que asumir. Quizá los propios éxitos conseguidos en la lucha contra ETA en los últimos años nos han llevado a bajar la guardia ante la amenaza fundamentalista".
"Hay cosas que merece la pena defender aunque uno se deje muchas plumas en el empeño", dijo Aznar, quien defendió el valor del vínculo entre Europa y Estados Unidos y subrayó que hay un "principio de reciprocidad: si quieres que uno te ayude cuando lo necesitas, debes ayudar cuando te necesitan".
E insistió en que el terrorismo sigue siendo la principal amenaza, a la que no debe vencerse cediendo, ni con "desistimientos ni apaciguamientos".
"Cada concesión les anima (a los terroristas)", dijo el ex presidente, quien rechazó también cualquier intento de explicar el terrorismo por "presuntas causas externas".