22 de enero de 2004.
Nueva York, (EFE).- La compañía Eastman Kodak anunció hoy una caída de sus beneficios y una reestructuración que incluye un fuerte recorte de empleos para ahorrar costes, reducir su dependencia de la fotografía tradicional e invertir en la digital.
Kodak, considerada la mayor compañía fotográfica del mundo, informó de que tiene previsto reducir un 21 por ciento de su plantilla hasta el año 2006, lo que, según sus propios cálculos, supondrá eliminar de 12.000 a 15.000 empleos en todo el mundo.
La compañía, que tiene su sede en Rochester (Nueva York), no precisó las instalaciones afectadas por la medida, y simplemente ha indicado que para finales del segundo trimestre de 2004 se habrán eliminado entre 1.700 y 1.900 puestos de trabajo.
Los recortes de plantilla continuarán hasta finales de 2006 y su objetivo es adaptar su negocio de fotografía tradicional a los cambios experimentados por la demanda y aumentar su competitividad.
La compañía calcula que para 2007 esta estrategia le permitirá un ahorro de entre 800 y 1.000 millones de dólares.
El costo del plan ha sido estimado entre los 1.300 y los 1.700 millones de dólares para los tres años, de los cuales el 60 por ciento sufragarán los despidos y las jubilaciones anticipadas.
Kodak asegura que sólo pretende responder a un descenso de las ventas de cámaras tradicionales en países industrializados, mientras que se mantienen, e incluso crecen, en países emergentes, como China, Brasil y México.
Al mismo tiempo, hay una mayor demanda de cámaras digitales en Estados Unidos, Canadá y Europa Occidental.
El pasado día 13, Kodak informó de que abandonará la venta de cámaras para películas de 35 milímetros en estas tres áreas geográficas y la fabricación de proyectores de diapositivas, aunque mantendrá la comercialización de películas para estos aparatos.
Al mismo tiempo, manifestó su intención de mantener esta línea de negocio, e incluso intensificarla, en los mercados emergentes, como América Latina, además de proseguir el desarrollo de tecnología de imagen para exámenes médicos, a fin de diversificar su oferta y mejorar sus resultados.
La empresa anunció hoy que sus beneficios en el último trimestre de 2003 fueron de 19 millones de dólares, o 7 centavos por acción, frente a los 113 millones de dólares, o 39 centavos por título, del mismo período del año anterior, lo que representa una caída del 83 por ciento.
Las ventas alcanzaron los 3.778 millones de dólares, lo que supone un incremento del 10 por ciento respecto a los 3.441 millones de dólares del cuarto trimestre de 2002, aunque sin tener en cuenta la depreciación del dólar la subida sería del 4 por ciento.
El año se salda con unas ventas de 13.317 millones de dólares, lo que supone un incremento del 4 por ciento respecto a las de 2002, aunque si se excluye el impacto que tiene el retroceso del dólar respecto a otras divisas, bajaron un 1 por ciento.
Los beneficios netos para 2003 se sitúan en 265 millones de dólares, equivalentes a 92 centavos por acción, frente a los 770 millones de dólares, o 2,64 dólares por título, de un año antes.
Los resultados del pasado ejercicio suponen una caída en los beneficios del 65,6 por ciento con respecto a 2002.
Las estadísticas indican que las ventas de cámaras tradicionales en EU y Europa Occidental bajaron el año pasado un 30 por ciento, un porcentaje similar al descenso de ventas en los dos últimos años de las llamadas "Advance Photo System", aparatos para carretes de película menores que permiten visualizar en una pantalla la foto tomada y eliminarla si no se está satisfecho.
A finales de septiembre, la empresa tenía una deuda de 2.900 millones de dólares y contaba con gastar 3.000 millones de dólares en compras hasta 2007 para ampliar su oferta digital.
Ese mismo mes, la empresa, fundada en 1880, anunció la reducción del 72 por ciento del dividendo pagado a sus accionistas, la primera vez que tomaba este medida desde que comenzó a entregar beneficios, en 1902.
