EL SIGLO DE TORREÓN
La vida las ha llevado por diferentes caminos. Como si fuera ayer, viejas aventuras y anécdotas, recordaron las ex alumnas del colegio Isabel la Católica, quienes el sábado pasado experimentaron por segunda ocasión la dicha de reencontrarse, muchas de ellas después de años de no hacerlo.
Este agradable convivio permitió a las ex alumnas de varias generaciones, incluso de las primeras, recordar esos momentos vividos dentro de las aulas, donde disfrutaron al máximo su infancia, adolescencia y juventud.
El reencuentro inició con una Eucaristía celebrada en al auditorio del colegio, a las 19:00 horas; Nadia del Rivero, ex discípula del colegio, entonó de manera especial la música sacra.
Al terminó de la misa, se proyectaron en el mismo auditorio diapositivas que evocaron el pasado transmitiendo la historia del colegio desde sus orígenes. Las presentes vieron la primera fachada que éste tuvo, ubicada en ese entonces sobre la avenida Hidalgo cerca de la parroquia de Guadalupe.
También se pudo apreciar fotografías de algunas ex alumnas como Esther y Elvira Mijares, Elvira Martínez Prieto, Virginia Peraza, sólo por citar los nombres de algunas de ellas, quienes se hallaban entre la concurrencia. Al final de la proyección, todas las damas cantaron el himno del colegio.
Y la fiesta...
Ahí no termino la emoción del reencuentro... más tarde, en los jardines del colegio se ofreció una cena que concentró un poco más de 230 ex alumnas que se reunieron para rescatar, recordar y compartir el significado de esos bellos momentos.
Una tarima forrada y de fondo algunas luces, dieron de forma singular un toque abstracto al escenario enmarcado por el escudo del colegio.
En el festín, un organista tocó valses de diferentes épocas que distinguieron a cada una de las generaciones. Para quienes cursaron sus estudios en los 60?s, fue el rock and roll, para las de los 70?s y 80?s, algunas melodías de John Travolta. Como detalle curioso, las damas no sólo se deleitaron escuchando sus emblemáticas melodías, sino que también pasaron al centro para moverse al ritmo de la música.
No sólo las ex alumnas gozaron de la velada, también las religiosas del colegio, como la madre Rosario Silva Campillo, actual directora de la institución, quien formó parte de este gremio de alumnas; de igual forma, estuvieron las madres Isabel y Bertha, por citar sólo el nombre de algunas de ellas.
Los momentos que se vivieron este día fueron muchos. De la nostalgia se pasó al compañerismo, de los recuerdos a ratos de risa y muchos otros más sentimientos lograron crear un compromiso entre las damas presentes de volverse a ver el próximo año, para de igual forma festejar el 90 aniversario de la fundación del colegio.
Forman las mujeres del mañana
El primer nombre con el que se conoció a esta institución desde su fundación en 1915 fue con el de Nicolás Bravo. Luego de 20 años se cambió a Isabel la Católica -como actualmente se le distingue- porque a lo largo de los años su población ha sido meramente femenil.
La fundadora de esta congregación fue Julia Navarrete y Guerrero, quien además instituyó en Ciudad Lerdo el colegio Primo Verdad.
El colegio Isabel la Católica, gomezpalatino de corazón, albergó en su internado a muchas niñas de diferentes ciudades de la República Mexicana.
Cabe mencionar que el próximo año en el mes de enero, el colegio celebrará su 90 aniversario de fundación.
MÁS DETALLES
Durante la ceremonia religiosa, el auditorio del colegio Isabel La Católica lució arreglos florales en tono blanco, color manejado por la institución como símbolo de pureza.
SACERDOTE: Herminio Talavera ofició la misa y durante su homilía remembró los valores de respeto y educación que las religiosas impartieron a las alumnas.
INTERNAS: Varias de las ex alumnas que fueron internas del colegio vinieron al festejo procedentes de Chihuahua, Delicias, Saltillo y Durango.
MENSAJE: La directora de la institución, madre Rosario Silva, al final de la celebración ofreció un mensaje en el que manifestó a las asistentes su agradecimiento por su presencia. De igual manera, hizo una remembranza de los inicios del colegio dedicado en cuerpo y alma a la niñez femenina.
FIN: Todas contentas por los ratos compartidos, prolongaron su estancia en la festividad que se terminó alrededor de las doce de la noche.