VENECIA, Italia.- La llaman tierra de comerciantes, ladrones y artistas, la bella Venecia se mece hace siglos sobre el bosque de pilotes de madera que a duras penas logran sostenerla en el vaivén de su melancólica laguna.
Sus húmedos y angostos puentes cruzan los canales por donde circulan góndolas y lanchones. Sus viejos y bellos palacios se reflejan en las tranquilas aguas del Gran Canal. Las miles de palomas revolotean entre los campanarios de las iglesias que junto a los techos de las casas de color rojizo, contrastan con el azul del mar Adriático y los miles de turistas entrecierran sus ojos, suspiran y se dicen en silencio, que nunca han visto una ciudad tan bella y romántica como Venecia.
Casi tres años transcurrieron, antes de regresar a Venecia y aunque prometí desde mi primer estancia en 1967 que siempre que llegara a Europa, llegaría a Venecia, Florencia y Roma; en las pasadas ocasiones no nos fue posible por haber llegado a África y Asia central en misión artística.
En Mestre en la costa vecina de Venecia, (ocho kilómetros de distancia) nuestro hotel Bologna donde como siempre con una sonrisa nuestro amigo José Sacamondo, que regentea el hotel, nos recibe.
Nuestra visita como siempre, es las Galerías de la Academia la máxima pinacoteca veneciana, luego la Basílica de la Salud para volver a admirar las obras de Tiziano, Tintoretto y Luca Giordano.
Estamos cerca del Setecientos Veneciano y la Escuela de San Roque y volver a admirar la rica colección donde sobresalen las telas de Mantenga, Lippi, Tintoretto y Tiziano.
También visita obligada al Palacio Vendramin Calergi, donde murió Wagner. En realidad, todo Venecia está lleno de manifestaciones artísticas, pero es la plaza de San Marcos donde se conjuga lo más representativo de sus monumentos y de su arquitectura.
Esta Plaza es el corazón de Venecia y la meta de sus millares de turistas. San Marcos es una bellísima de poco más de una hectárea donde se encuentra el Palacio Ducal, bellísimamente decorado en su interior como obras del arte veneciano Tiziano. Verones, Carpaccio, Bassano, Bellini, Tiépolo y otros muchos aunque geniales no tuvieron la categoría admirativa de los anteriores. En esta Plaza se admira la torre campanaria de la Basílica de San Marcos, la Biblioteca Marciana, la Torre del Reloj con sus famosas estatuas de los Moros y el Museo Correr. Desde luego que la máxima atracción es la Basílica, rara mezcla del arte bizantino toscano, griego medieval, lombardo y veneciano. Los dorados mosaicos de su fachada, se conservan a las mil maravillas a pesar que el magnífico templo prácticamente se está desmoronando al decir de los expertos, que aquí entre nos esto lo han divulgado desde hace siglos y la catedral como si nada.
Venecia, la Reina del mar, la llamaron casi desde que surgió sobre las islas de Rivoalto en el año 810, como consecuencia del impulso violento de las invasiones barbáricas que sufrían los de la costa y lograron asentarse en estas islas en el centro de la laguna. Así nació lo que fue la más rica y poderosa República en los siglos subsecuentes. Decíamos al principio que la llaman tierra de comerciantes, artistas y ladrones pues desde la época de Marco Polo, Venecia se enriqueció con joyas artísticas inigualables que los barcos venecianos en sus correrías traían; sólo nombraré algunas de las miles de joyas que trajeron del Oriente y otras partes del mundo conocido de la época. Los Tetrarcas, los Moros que cada hora golpean la campana en la Torre del Reloj. Al frente, en lo alto de la fachada de la Catedral en el segundo piso los bellos caballos en bronce de tamaño natural, todas estas obras no se compraron sino se sustrajeron de sus lugares de origen por la fuerza bruta de los ejércitos venecianos.
Venecia recibe un promedio de cien mil turistas cada semana procedentes de todos los rincones del mundo cifra superior del total de habitantes de la ciudad. Con cuarenta y cinco kilómetros de canales y más de dos mil calles, muchas de éstas de pronto se convierten en callejones.
No podemos dejar la visita obligada a la Iglesia de Santa María Gloriosa dei Fraidi, que es uno de los edificios religiosos más importantes de Venecia. La capilla central la adorna la obra maestra ?La Asunción? pintada en 1518 por Tiziano. A lo largo de dos paredes de esta iglesia guarda importantes monumentos funerarios entre éstos el de Tiziano.
Conocer Venecia, no es sólo la ciudad hay que incursionar sus demás islas entre éstas la más importante Lido, la franja de playa veneciana donde están modernos e importantes hoteles, Lido está mas allá de San Marcos, con comercios de prestigio además está Torcello, Murano y Burano, célebres por su arte en vidrio.
Al atardecer hay que disfrutar una rica merienda que las cafeterías colocan sus mesas en toda la Plaza el murmullo de sus comensales se unen a las notas de los conjuntos musicales que están en las distintas cafeterías. Los faroles iluminan los canales, se escucha el perenne oleaje del Adriático, al golpear sus góndolas acantonadas y es cuando Venecia toda, sonríe al atrapar a los... TRASNOCHADORES TURISTAS.
VENECIA, ITALIA AÑO 2003
