El jefe de gobierno del DF, dijo que se debió abrir mesas de negociaciones con los dirigentes y escuchar su punto de vista para lograr una propuesta integral respecto al IMSS.
05 de agosto 2004.
México (SUN-AEE).-La actuación de los senadores de aprobar las reformas a la Ley del IMSS "es una vergüenza", afirmó Andrés Manuel López Obrador, jefe de gobierno del Distrito Federal, quien insistió que las modificaciones fueron impuestas y el mayoriteo genera un ambiente de insatisfacción, de farsa.
Dijo que en lugar de abrir mesas de negociaciones con los dirigentes de los trabajadores y escuchar su punto de vista para lograr una propuesta integral, impusieron y "ese no es el camino, no tiene nada que ver con las aspiraciones democráticas de la sociedad".
Aseguró que mientras hicieron sus "enjuagues" arriba, a espalda de la gente, pretendía que nadie se moviera, que se quedaran en sus casas y hasta les aplaudieran, a pesar de que los golpearon con una reforma antipopular.
López Obrador aprovechó para indicar que su gobierno fue señalado por no impedir las manifestaciones. "Si la gente sale y se manifiesta, ¨ah la autoridad del Distrito Federal porque no actúa?".
Dijo que eso coloca a la administración local en una situación muy difícil porque tienen que actuar institucionalmente y al mismo tiempo respetar el derecho de manifestación.
Confirmó que el presidente de la mesa directiva del Senado, el priista Enrique Jackson, envió una carta al gobierno de la ciudad a las 13:20 horas para solicitar la intervención de las autoridades.
Calificó de lamentable que eso suceda, pues "hay que a utilizar la fuerza de la política no la política de la fuerza".
Insistió en que se genera un ambiente de insatisfacción, de ira, por las imposiciones que no tienen nada que ver con el método democrático, porque los acuerdos se negociaron arriba entre PRI, PAN y el Gobierno Federal.
