Arrastrando, arrastrando, el caracol se va encaramando.
Arrebolada de tarde, mañana de aire.
Arrieros somos y en el camino andamos.
Así como el pescado, las visitas después del tercer día huelen.
Asno callado por sabio es contado.
Atender y entender para aprender.
Atragántate Matías, que esto no es todos los días.