AGENCIAS
WASHINGTON, EU.- El nuevo Gobierno de Irak usará a ex miembros del Ejército de Saddam Hussein en sus fuerzas de seguridad luego de la cesión de la transferencia de soberanía, dijo ayer la asesora de seguridad nacional estadounidense, Condoleezza Rice.
Sin embargo, agregó Rice en una entrevista de televisión, “los iraquíes quieren que todos sepan” que no se reenganchará “a personas con sangre en sus manos”.
“Ellos reconocen que el futuro de Irak no puede ser construido sobre los pilares de lo peor del antiguo partido Baath”, dijo Rice en declaraciones desde Turquía, donde el presidente norteamericano George W. Bush se apresta a participar en una cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
Según Rice, las autoridades iraquíes están dispuestas y son capaces de investigar los antecedentes de los posibles candidatos antes de decidir que pasen a integrarse en las nuevas fuerzas de seguridad.
La responsable estadounidense recordó que una de las prioridades del Gobierno iraquí que tomará las riendas del país tras el traspaso de soberanía el próximo miércoles, será precisamente la seguridad.
Por ello, sabe que tiene que tomar medidas, entre las que se incluye el regreso de personal que cuente con experiencia y que esté “bien entrenado”, añadió.
Su trabajo será difícil porque “es rotundamente obvio que quienes no tienen futuro en el nuevo Irak y los terroristas extranjeros tratan de hacer que descarrile esta transición política”.
No obstante, “no podemos dejarles” lograr su objetivo y “vamos a proceder al traspaso de poder a los iraquíes” tal y como está previsto, el próximo miércoles.
En mayo de 2003, el gobernador estadounidense de Irak, L. Paul Bremer, ordenó el desmantelamiento de las fuerzas armadas iraquíes, una acción que el primer ministro interino Iyad Allawi consideró un error.
“Los iraquíes creen que hay algunas personas que cuentan con adiestramiento en materia de seguridad que deberían retornar” a las filas, señaló Rice. “Algunos ya lo han hecho. El general Petraeus está examinando a algunas de esas personas y lo ha estado haciendo durante algún tiempo”.
El teniente general David Petraeus encabeza la Oficina de Seguridad en la Transición, que supervisa el reclutamiento y adiestramiento de las fuerzas de seguridad en Irak.
Ofrecerá Allawi amnistía a insurgentes
El primer ministro interino de Irak, Iyad Allawi declaró que desea lograr la reconciliación de su país y planea ofrecer amnistía a algunos insurgentes iraquíes.
“Estamos elaborando planes para brindar amnistía a los iraquíes que respaldaron la llamada resistencia sin cometer delitos, con el objeto de aislar las bases elementales de los terroristas y delincuentes y reducir su base de respaldo”, dijo Allawi durante una entrevista.
“A través de este proceso el Gobierno hará una clara distinción entre los iraquíes que hayan actuado contra la ocupación por desesperación y aquellos terroristas extranjeros y criminales cuyo único objetivo es matar y mutilar a gente inocente y ver la caída de Irak”.
Irak ha experimentado una creciente ola de explosiones en todo el territorio, incluso en la capital, Bagdad, mientras se apresta a transferir el poder de la Coalición a un Gobierno interino, el 30 de junio.
Allawi dijo que la primera prioridad de su país será establecer seguridad y “la rápida reconstrucción de las instituciones claves para administrar justicia en Irak, entre ellos el Ejército, la policía, el control fronterizo y los servicios de inteligencia”.
