El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- La tradición de comer los platillos del mar durante la Cuaresma ya no es tan sólida en la Comarca Lagunera. El consumo de filetes de pescado, cocteles de camarón y caldos siguen en el gusto de los comensales, sin embargo, el flujo de clientes a los restaurantes ha disminuido al igual que el monto que gastan por persona.
En un sondeo realizado en varios negocios de la ciudad, el comentario generalizado es que la semana no ha sido tan buena en términos de ventas como en otros años.
La ostionería ubicada en el Mercado Juárez de Torreón es uno de los sitios más tradicionales en preparar pescados y mariscos durante todo el año. La gerente, Imelda Saldaña, relató que al mediodía apenas empezaba a llegar la gente.
Sin manejar paquetes promocionales, sólo platillos tradicionales como capirotada, tortas de camarón y nopales navegantes de chile colorado y camarón seco, se observaron a media mañana pocos clientes que degustan la comida de Cuaresma.
Aunque se asegura que la Semana Mayor junto a la Navidad es la mejor época para su negocio, las ventas hasta el momento han aumentado tan sólo en un 50 por ciento. La mayor competencia dentro del mercado y la falta de liquidez son razones de peso para que los clientes no lleguen y los pocos que consumen lo hagan en cantidades cada vez menores.
Mientras en el año pasado una persona gastaba en promedio 200 pesos, ahora, el monto ha descendido hasta 100 pesos. Lo anterior no obedece a un aumento en los precios de las cartas de los restaurantes, sino a que las personas no cuentan con la liquidez para consumir como hace algunos años, puntualizó la entrevistada.
En otra ostionería se reportó una baja afluencia de clientes. Cuentan con 43 años de preparar platillos propios del mar y aseguran que antaño las personas respetaban la vigilia y no consumían carne roja durante la Semana Mayor.
La pérdida de esta tradición se refleja en malas ventas para los restaurantes especializados en este tipo de platillos, así como el incremento en precios que han tenido la carne roja y blanca.
Contrario a los malos reportes de los negocios especializados en comida del mar, otros restaurantes que se especializan en carnes rojas tienen un lleno completo a la hora de la comida, lo que interpretan como un debilitamiento de la tradición de comer pescado y mariscos.
El gerente de uno de estos negocios, Juan Manuel Alanís Rodríguez, aseguró que la Semana Santa es una de las mejores fechas, ya que se reporta un incremento del 100 por ciento de sus ventas.
El no comer carne roja ya no es una tradición que tenga arraigada la gente de La Laguna, afirmó Óscar Flores Sánchez, gerente de alimentos y bebidas de un restaurante especializado en cortes tipo americano. Reporta una caída de tan sólo un 20 por ciento de sus ventas.
La demanda de cortes de carne tipo americano y el cabrito se mantienen como cualquier día del año en dicho negocio.