EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- Muy adictiva se convierte la cocaína al ser mezclada con otras sustancias químicas que los “procesadores” emplean para realizar hasta tres “cortes”, repotenciando el daño que causa al consumidor de tal forma que si antes su consumo era para obtener una condición emocional, esto se convierte en una necesidad fisiológica que obliga a incrementar las dosis, dijo Raciel López Salazar, encargado de la Delegación Estatal de la Procuraduría General de la República (PGR).
Son dos los factores principales para los que se hacen dichas rebajas: el primero se refiere a que haya una mayor demanda en el mercado y el otro es meramente mercantil. Para que la cantidad que se procese se triplique, lo que representa una mayor ganancia, señaló.
López Salazar explicó que de por sí la cocaína es sumamente dañina para quien acostumbra su uso, adicionada con los mencionados químicos eleva todavía más esta condición y también la convierte en una necesidad fisiológica, por lo que el adicto muestra una clara tendencia a consumir mayores dosis en forma más frecuente.
Esto es, dijo, ya no tanto por sentir la sensación de euforia, sino porque su organismo se lo exige y no tiene la voluntad para controlarlo, subrayó.
Es por eso que muchas personas que consumen cocaína ya no sienten lo mismo con una o dos “grapas”, por lo que tienen que adquirir lo doble, ya que de lo contrario comienzan a sentir lo que pudiera llamarse el “síndrome de abstinencia”, señaló López Salazar.
Paradójicamente, mencionó que a menor calidad de la droga, el daño que causa es mayor.
Efecto de mercado
Quienes procesan la droga, además de convertirla con mayores propiedades de adicción, su intención además es sacar la inversión y mucho más, de tal forma que si se adquiere cierta cantidad y se le realizan unos tres “cortes”, la ganancia se triplica, lo que resulta un fructífero negocio para quienes se dedican a esta lícita actividad, manifestó el encargado de la PGR.
Como ejemplo puso que si se compran 300 gramos en mil pesos y se le añaden sustancias de las más baratas en las que se empleen cuando mucho cien pesos, la ganancia que se obtiene al rebajarse por lo menos tres veces, serían tres mil 300 pesos.
Por desgracia, dijo, que mientras haya mercado seguirá habiendo demanda y a la inversa.
Lucha frontal
Raciel López Salazar expresó que es por todo lo anterior que la lucha contra el “narcomenudeo” se ha reforzado de tal forma de terminar con los grupos que comercializan estos enervantes.
Reconoció sin embargo que es una lucha dispareja, pues tan pronto son detenidos los cabecillas de uno de estos grupos, surgen tres o cuatro más que desean adueñarse del mercado y de lo que el anterior dejó convirtiéndose esto en un “monstruo de mil cabezas”.
Daño hormonal
El delegado por ministerio de Ley de la Procuraduría General de la República, que además del daño que causa la cocaína al sistema nervioso, está otro más importante que se refiere a lo sexual, pues el consumidor llega a manifestar cambios importantes a nivel hormonal.
Estudios realizados por profesionales de la medicina, han observado que quienes consumen altas dosis de este alcaloide, a la larga presentan problemas de disfunción eréctil, lo que les impide tener relaciones sexuales. Además se registra un cambio con el que la presencia de hormonas femeninas se elevan considerablemente.
LO QUE USAN
Entre las diferentes sustancias que los “procesadores” acostumbran a emplear para rebajar o “cortar” la cocaína, están:
*Lactosa.
*Bicarbonato.
De las más dañinas:
*Cloro.
*Raticida.
FUENTE: Procuraduría General de la República
