Inspectores de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) retiraron una camioneta completa de la empresa gasera Regio Gas Lerdo, toda vez que se revisaron varios de los cilindros y se pudo comprobar que éstos no tenían la cantidad del combustible señalada, muy por debajo de los niveles permitidos.
El delegado estatal de la Profeco, Luis Enrique Mercado Rodríguez, indicó que este operativo se lleva de manera permanente, ya que esa dependencia tiene la facultad de intervenir de manera directa, en el caso de las gaseras, para hacer las revisiones para garantizar que estén cumpliendo con las cantidades de gas que se especifican y sobre todo lo que se cobra al consumidor.
En este sentido, indicó que se detuvo un camión de la gasera antes mencionada, comenzando a revisar el peso de los tanques de gas y se pudo comprobar que la mayoría de éstos registraban faltantes, incluso a uno de los cilindros le faltaba más de un kilo de combustible, decidiendo retirar la unidad completa con todos los tanques y apercibiendo a la empresa para que realizara el rellenado de los tanques de manera correcta y dentro de los parámetros mínimos establecidos.
Cuando se presentan este tipo de casos, explicó el funcionario federal, se coloca un sello a cada tanque que ha sido detectado, con la leyenda que deberá ser rellenado por no contener la cantidad correcta de combustible, a la vez que se advierte a la empresa que se realizará una verificación para constatar que efectivamente se cumplió con dichas recomendaciones, ya que en caso contrario comenzarán a aplicarse otra serie de sanciones.
El delegado federal de la Profeco indicó que este programa de verificación de los tanques de gas se lleva a cabo de manera permanente, debido a que se tiene la ingerencia directa, y cada vez que se detecta un caso similar se procede de la misma forma.
Asimismo, se tiene la calibración de los equipos de las empresas gasolineras para garantizar que éstas despachen la cantidad correcta del combustible a los consumidores, siendo de manera permanente, pero en este caso siempre es a petición de los propios gasolineros quienes solicitan que se lleve a cabo la revisión y calibración correspondiente de sus bombas. Cuando no se puede realizar el ajuste necesario, se ?inmovilizan? las mangueras hasta en tanto no se hagan los arreglos al mecanismo.
