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México, DF.- El presidente Vicente Fox presentó ayer su declaración patrimonial anual correspondiente al año 2003, en la que informó que tiene ingresos netos por dos millones 103 mil 239 pesos por cargo público, 300 mil 692 por actividad financiera y dos millones 700 mil pesos por un reembolso de capital de El Cerrito.
El titular del Ejecutivo federal también declaró que obtuvo ingresos por un seguro de separación individualizado cuyo monto fue de 267 mil 296 pesos y por devolución de préstamo e intereses de dependientes y cónyuge por 889 mil 504 pesos.
Ratificó que su compromiso ha sido, es y seguirá siendo con una verdadera ética en el ejercicio del Gobierno, pues con razón y con justicia, señaló, la población exige a las autoridades actuar con una ética pública a la altura de los nuevos tiempos democráticos.
Subrayó que la corrupción es el principal enemigo de la función pública y que la honestidad, la transparencia y la rendición de cuentas son la ética de la democracia, por lo que la violación de esos valores es una agresión a la sociedad y a sus fundamentos.
“Hoy más que nunca, los bolsillos de los gobernantes deben de ser de cristal”, hizo énfasis Fox Quesada en la ceremonia privada en la residencia oficial de Los Pinos, en la que estuvo presente el secretario de la Función Pública, Eduardo Romero Ramos.
El primer mandatario dejó claro que “los Gobiernos que, como éste, hemos recibido un mandato democrático, estamos obligados a combatir la corrupción de frente, sin argucias, sin ningún artificio”.
Expresó que en “esa batalla no caben pausas ni vacilaciones. La lucha contra ese cáncer social debe ser políticamente neutral, sin colores partidistas, ni tintes propagandísticos”.
Fox Quesada subrayó que el combate a la corrupción es un imperativo ético y moral y manifestó que el estilo de su Gobierno se basa en la más absoluta nitidez, porque “trabajamos con las manos limpias y de cara a la gente”.
Señaló que el Gobierno de la República está empeñado en dotar de un nuevo valor social a la función pública y no tiene nada qué ocultar, por lo que los servidores públicos tienen la obligación de presentar su declaración patrimonial en tiempo y forma.
Convocó, en ese contexto, a los servidores públicos a cumplir de manera oportuna con absoluta transparencia esa responsabilidad republicana.
