Han determinado que el vino y también la cerveza, ambos con sus componentes polifenólicos, son instrumentos efectivos en la lucha contra el cáncer de mama.
Washington (EFE).- Una serie de experimentos realizados en laboratorios de Estados Unidos ha demostrado que el té, el vino y el curry no son sólo dos buenas bebidas y un excelente condimento, sino que también tienen bondades medicinales mayores de las que se creía hasta ahora.
Desde tiempos inmemoriales nuestros antepasados han pregonado que muchas hierbas e infusiones son buenas para la salud, pero sus afirmaciones chocaban con el escepticismo, en el mejor de los casos.
Sin embargo, una serie de pruebas realizadas en los últimos meses en EEUU y Portugal han puesto a raya a quienes no creían que sus componentes pudieran ser sinónimo de buena salud para muchas personas.
En la actualidad es común que los cardiólogos receten a sus pacientes que beban al menos un vaso de vino diario (tinto, si es posible) para frenar las amenazas sobre su sistema cardiovascular.
Hay muchos que creen que la baja incidencia de enfermedades arteriales entre los franceses se debe parcialmente a las propiedades farmacológicas de los compuestos polifenólicos (responsables de la capacidad antioxidante) del vino tinto que consumen con asiduidad.
Pero ahora, investigadores de la Universidad de Oporto, en Portugal, han determinado que el vino y también la cerveza, ambos con sus componentes polifenólicos, son instrumentos efectivos en la lucha contra el cáncer de mama.
El estudio de los científicos portugueses incluye su advertencia correspondiente: sus resultados no significan que las mujeres deban aumentar su consumo de alcohol.
Otro estudio realizado por científicos de la Universidad de California reveló que en el té negro y en el té verde hay otro tipo de polifenoles que frenan el crecimiento de las células del cáncer de próstata.
No sólo eso. Los investigadores también determinaron que en la persona que había bebido té verde o negro durante cinco días seguidos, las células redujeron notablemente su crecimiento cuando fueron puestas en un ambiente de suero.
En un informe presentado ante la conferencia sobre Biología Experimental 2004 celebrada en Washington, los científicos indicaron que aparentemente los ingredientes del té concentraron su efecto sobre las poliamidas, sustancias producidas por enzimas y vinculadas con los cánceres malignos.
A las importantes bondades medicinales del vino y el té se agregaron las del curry, ese importante y popular condimento que es una combinación de especias y que, según un estudio, ayuda a prevenir el mal de Alzheimer.
El estudio, presentado también en la reunión sobre Biología Experimental 2004 organizada en Washington por la Sociedad de Fisiología de EEUU, indicó que el portador de las buenas noticias es la cúrcuma, el ingrediente que le da el típico color amarillo al curry.
Según los científicos, la cúrcuma activa las propiedades de una enzima clave que protege al cerebro de las condiciones de oxidación típicas de la edad avanzada.
La enzima es identificada por los científicos como la hemeoxigenasa-1 (HO-1) la cual sería un mecanismo fundamental de defensa para las neuronas expuestas a factores oxidantes.
