DESTACA RODRIGO RATO QUE LOS CAMBIOS DARÁN UN MAYOR DINAMISMO A LA ECONOMÍA.
El organismo expondrá los beneficios de abrir el sector energético a la inversión privada.
Notimex
Washington, EU.- Las reformas fiscal y energética en México darán un mayor dinamismo a los sectores no petroleros, con lo que se impulsaría la necesaria diversificación de la economía mexicana, estimó el director gerente del FMI, Rodrigo Rato.
En declaraciones Rato dijo que tales reformas generarían el aumento de la inversión extranjera y la economía mexicana estaría lista para una mayor competencia -producto de los procesos de liberación económica en el mundo- y sólo así mantendría niveles óptimos de crecimiento.
El titular del Fondo Monetario Internacional (FMI) consideró que al completar las reformas, México podría superar las proyecciones de crecimiento económico que en 2005 se ubican en 3.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
“México podría crecer mucho más, y de una manera más intensa a lo largo del tiempo, lo que le permitiría sin duda mejorar muchas cuestiones sociales que son muy importantes”, dijo en la víspera de su visita de 24 horas a la Ciudad de México.
Esa agenda se centra en la necesidad de mantener políticas de gasto más eficaces y concretar las reformas, algo que Rato calificó como aspecto destacado en la visión del FMI, así como hacer un mejor uso de los recursos que se obtengan por los altos precios del crudo.
El español se refirió en particular a las reformas, “que nosotros consideramos muy importantes para que México pueda beneficiarse totalmente de los acuerdos comerciales, y también para que se prepare para lo que será la mayor competencia internacional”.
El tema será quizá uno de los más difíciles durante la reunión de Rato con legisladores mexicanos, antes quienes expondrá la visión del FMI sobre los beneficios de abrir a la inversión privada los sectores de la energía y telecomunicaciones.
“Creo que será una buena oportunidad para ratificar nuestra opinión de que las reformas son muy importantes para una economía que este año va a tener un crecimiento sano de entre 3.8 y 4.0 por ciento, y que sin duda lo puede mantener el año que viene”, dijo.
Según las proyecciones del FMI anunciadas en septiembre pasado durante la reunión de otoño, el crecimiento de la economía mexicana se desinflará el próximo año, y una de las causas a las que podría atribuir la baja sería a la ausencia de avances en las reformas. Frente a este empantanamiento, Rato afirmó que su visita no está orientada a ofrecer consejos al gobierno o al Congreso mexicano sobre cómo superar las diferencias que han impedido la discusión de la propuesta de reformas.
Precisó que el FMI no es una institución que haga juicios políticos, “lo que sí podemos insistir, tanto al gobierno como el parlamento (Congreso), es en la necesidad y la importancia de que se haga la reforma”.
En su opinión, la reforma hacendaria permitiría desarrollar una política social más amplia, que brinde mayor capacidad operativa al gobierno, de manera que mantener un déficit bajo no se haga a expensas de sacrificar las mejoras sociales necesarias.
Para Rato, continuar los procesos de reforma de liberalización del sector eléctrico, así como de las telecomunicaciones, “son elementos que pueden dinamizar muchísimo las inversiones en México”.
La economía mexicana “tiene gran capacidad de crecimiento y va a necesitar muchas e importantes inversiones en la industria de redes y de telecomunicaciones, y tiene que hacer atractiva esa inversión para nacionales e internacionales, eso es muy importante”, dijo.
Sin embargo, su evaluación fue menos dramática que la que el FMI expresó en su reporte de septiembre pasado, donde advirtió que en el caso de México “los prospectos para 2005 están empañados por el estancamiento de las reformas estructurales”.
El reporte se refirió también a los riesgos asociados al uso de los ingresos derivados de los altos precios internacionales del petróleo, que han oscilado en los 50 dólares en las últimas semanas.
En este sentido, Rato calificó como alto el precio de 27 dólares por barril que aprobó el mes pasado la Cámara de Diputados dentro del presupuesto para 2005, que presupone mayores ingresos, e hizo ver que este incluye ya una utilización importante de recursos.
Uno de los aspectos particulares que Rato buscará conocer en sus contactos con las autoridades económicas tiene que ver con la existencia de instrumentos adicionales para que México aumente su inversión pública de manera eficiente.
No se trata de discutir sólo el uso de los recursos, algo que, dijo Rato, podría tener “efectos macroeconómicos complicados” en la inflación, pero también considerar modelos de inversión pública eficientes que eviten costos innecesarios o inversiones no productivas.
“Ese es un riesgo claro en este momento en todos los países que tienen un alto nivel de aumento de ingresos del petróleo, y México no es la excepción”, precisó el economista y político de 55 años de edad.
“No se trata solo de plantear la necesidad de emplear estos recursos extraordinarios para crear fondos o inversiones a largo plazo que impacten hacia generaciones futuras, sino también que se aplique de manera eficiente en el plano de las inversiones”, apuntó.
Rato aprovechará su entrevista con el presidente Fox para agradecer el apoyo de México a su candidatura a la dirección del FMI, donde hace cinco meses pasó a sustituir al alemán Horst Kohler, quien renunció al cargo después de ser nombrado presidente de Alemania.
“Voy también a escucharle, qué es lo que el presidente cree que es en estos momentos la agenda importante internacional, no sólo para México sino para América Latina. Me gustaría escucharle cuál cree que debe ser nuestro papel”, dijo.
“Ante la opinión pública, demostrar que el FMI es una administración pública internacional que está al servicio de los países, que nuestra función es ayudar a las naciones a resolver sus problemas y también la economía mundial”, puntualizó.