MADRID, (Reuters) - Las calles de las ciudades y pueblos de España se llenan de miles de niños y familias la tarde del 5 de enero que, desafiando al frío o la lluvia, se afanaban para ver pasar la cabalgata de los Reyes Magos que traen los juguetes y regalos con los que al día siguiente culminan las fiestas de Navidad.
La cabalgata de Madrid, que este año contará con 26 carrozas y diversos espectáculos, reunió el año pasado a 500.000 personas.
En las ciudades costeras, Melchor, Gaspar y Baltasar llegan por el mar.
Los tres Reyes Magos visitan a los niños españoles desde hace mucho, mucho tiempo, y continúan haciéndolo a pesar de la influencia cada vez mayor del nórdico y gordinflón Papá Noel o Santa Claus.
Aunque el Día de los Reyes Magos, o Epifanía, tiene un origen religioso (conmemora la adoración de unos sabios llegados de Oriente al Niño Jesús que acaba de nacer), la costumbre más laica de sorprender el 6 de enero con juguetes y regalos a los niños data del siglo XIX.
Hasta mediados del siglo XIX no se representó a los Reyes Magos como portadores de juguetes para los niños. Hasta entonces, los obsequios se limitaban a necesidades de la vida cotidiana, como ropa o comida, según dice el portal de Internet Terra.es en su apartado de tradiciones navideñas.
La gran mayoría de los niños españoles sienten una verdadera fascinación por estos personajes misteriosos y mágicos, y la noche del 5 de enero se apresuran a poner sus zapatos, junto a bebida y comida para sus Majestades y sus camellos, convencidos de que al despertar se harán realidad sus deseos, por lo general, de muchos juguetes.
Más de la mitad de los españoles sigue prefiriendo entregar los regalos el Día de Reyes, aduciendo que es una tradición de toda la vida, frente a una minoría que opta por el Papá Noel de Navidad, porque los niños pueden disfrutar más tiempo de los regalos durante las vacaciones navideñas.
"Los Reyes Magos son más nacionales. Yo a Papá Noel lo he conocido de mayor, y a los Reyes los conozco desde siempre", dijo Eva, de 40 años, y madre de dos niños.
En una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del año 2001, el 54,4 por ciento de los españoles encuestados elegía los Reyes Magos para entregar los regalos, frente al 15 por que optaba por Navidad.
Algunos años antes, en 1998, la misma encuesta reflejaba una relación del 58 por ciento favorable a los Reyes y el 13,7 por ciento a Papá Noel, con lo que se registra un ligera tendencia favorable al señor del trineo.
"En Navidades, mis hijos son británicos hasta el 25 de diciembre y españoles a partir de entonces", cuenta una periodista británica casada con un español y madre de dos niños, a cuya casa llegan regalos de Papá Noel y de los Reyes
Magos, una tendencia que secunda el 19 por ciento de los hogares españoles.
OMNIPRESENTE NOEL
El predominio del que gozan aquí Melchor, Gaspar y Baltasar es único, y en ninguna otra parte del mundo el Día de los Reyes Magos se celebra tanto.
La tradición de los juguetes sigue viva en algunos sectores de la población de México, Paraguay o Argentina, pero en la gran mayoría de las naciones latinoamericanas el mayor peso de las Navidades lo tiene el 24-25 de diciembre con el nacimiento del Niño Jesús, y la llegada de Papá Noel, que es donde se dan los grandes regalos.
Lo mismo ocurre en Venezuela, donde son las familias más tradicionales, sobre todo las que tienen ascendencia española, las que celebran el Día de Reyes con regalos para sus hijos, pero no es una festividad muy difundida entre el común de la gente.
Tampoco los países europeos vecinos y católicos celebran el 6 de enero de forma parecida. En Italia, aunque es una fiesta nacional, los niños no reciben la visita de los Reyes Magos, sino la de un personaje llamado Befana, una pobre y vieja bruja buena que trae algún juguete y dulces a los pequeños.
En Francia y Portugal, la única similitud con España es la tradición de comer el Roscón de Reyes (un bizcocho con trozos de fruta glaseada con una pequeña sorpresa dentro), pero ni hay regalos ni es un día festivo.
En países nórdicos como Alemania, Holanda o Bélgica la entrega tradicional de los regalos es el 6 de diciembre, el día de San Nicolás (Santa Claus es una corrupción de su nombre alemán sint o sinte klaas).
"Oí hablar por primera vez de los Reyes Magos cuando regresé a España con 23 años", dijo Martín, de 41 años, hijo de emigrantes españoles en Australia.
