Hoy en día analizar a Vaqueros Laguna requiere ir más allá del aspecto deportivo, aunque es evidente que los problemas del pitcheo han aparecido luego de que este departamento soportó al equipo en sus primeros partidos de la temporada. La escuadra de Gerardo Sánchez al parecer ha perdido esa chispa que es indispensable en el beisbol y suelen tener peloteros como José ?Café? Herrera, que podría ser el próximo refuerzo, ya para la serie en casa frente a Pericos de Puebla.
El regreso de las jornadas dobles en la presente campaña ha traído serios problemas en el staff de Vicente Romo y Adolfo Navarro, porque ninguno de los abridores ha tenido los mismos días de descanso, por lo que las últimas salidas han sido con trabajos irregulares, como los de Isabel Girón, Emiliano Girón, Francisco Madero, Martín Gómez y ayer Héctor Chavarría.
Existen noticias de que ya se han tomado cartas en el asunto y muy pronto la rotación será de cinco inicialistas, de acuerdo a la decisión de Gerardo ?Polvorita? Sánchez con sus coaches de pitcheo. Los desajustes entre los brazos abridores de Vaqueros Laguna provocan pérdida en la velocidad y el control, situaciones que ya es urgente solucionar.
Comentábamos al arranque de la campaña con Carlos Gómez del Campo, vicepresidente de la organización, que Vaqueros podría volar alto mientras el pitcheo respondiera, sin embargo, luego de las primeras series, lo que era el mejor departamento en el equipo se ha caído. En la ofensiva el impresionante arranque de Israel Alcántara quedó atrás, pero muy poco aporte se tiene de Kevin Grijak y Wilton Veras, que supuestamente deben cargar con el peso de la ofensiva. Esa situación y la falta de un primer bateador complican mucho la labor del manager y en este caso, Gerardo Sánchez no es el culpable.
Las derrotas consecutivas han creado un ambiente difícil en el seno de la organización y el grupo no enseña ya esa chispa que todo equipo de beisbol requiere cuando busca el éxito. El punto anterior es fundamental y por ahí se puede entender el interés de la directiva por José ?Café? Herrera, un dominicano con buena trayectoria en Estados Unidos, con dos años en ligas mayores y exitosas campañas en Triple A.
Herrera es uno de esos jugadores alegres que saben motivar al grupo y de confirmarse su llegada a la organización, podría ser una inyección de ánimo que haga al grupo pelear con todo contra cualquier novena, así sea la mejor armada en el papel. El dominicano tuvo buen año con Yucatán la campaña anterior y en la presente, con el mismo equipo, en 23 partidos tomó 80 turnos al bat, anotó una carrera, conectó 18 imparables, tres fueron dobles; impulsó siete carreras, recibió tres pasaportes, siete ponches y se robó dos bases. Fue sacrificado para activar al infield curazaleño Sharnol Adriana.
Lógicamente al hablar de la posibilidad de un nuevo refuerzo extranjero, es factible pensar en quién dejaría su sitio y en apreciación personal, Kevin Grijak y Wilton Veras parecerían peligrar, aunque el mal momento de Isabel Girón podría convertirlo en el elegido; directiva y cuerpo técnico serán los encargados de tomar la decisión y como siempre, cabe esperar que ésta sea la mejor para beneficio del equipo.
Actualmente es necesario recuperar la confianza que al parecer se ha perdido, no se nota en el grupo esa alegría por jugar al beisbol y es que cuando se entra en una racha negativa como la que hoy viven los Vaqueros, al revisar los números individuales y las últimas actuaciones, se encuentra un gran descenso en cada pelotero, el cual lógicamente trae como consecuencia la racha negativa que se vive.
Kevin Grijak se fracturó un dedo del pie en el mismo cuarto del hotel, en Aguascalientes, el norteamericano quiso mantenerse en actividad como muestra de su profesionalismo, pero si aún no puede reponerse, parece el tiempo de buscar sustituto, porque hoy al hacer un recuento de lo sucedido a casi un mes de temporada, la situación en el papel se antoja mejor que en 2003, cuando Alex Taveras inició un problema que creció como bola de nieve y ni la salida del dominicano ayudó a controlarlo.
Gerardo Sánchez lucha contra problemas que suelen darse en todos los equipos, el momento es difícil porque las derrotas acumuladas provocan reacciones desfavorables y aumentan la presión; la gira larga que se inició en Monclova todavía tiene dos juegos pendientes y serán parámetros para ver si el equipo se mantiene en la pelea en busca de los buenos resultados.