Desde que la directiva de Vaqueros Laguna se interesó por Gerardo Sánchez para dirigir la novena, se dijo que ?Polvorita? era un ganador; hablamos del hombre que tiene la marca de más juegos consecutivos en Liga Mexicana, para lograrla se necesitan principalmente dos cosas; gran consistencia para no lesionarse y mantener un nivel competitivo elevado.
Ahora, cuando Gerardo Sánchez lleva casi un mes al frente de Vaqueros Laguna, la situación no ha cambiado, este elemento aún es ganador y la racha que hoy vive el equipo naranja le impide conciliar el sueño. El manager tiene plena confianza en sus jugadores, conoce la capacidad de quienes integran su roster, pero ante todo, siente la confianza que da el recibir todo el apoyo de la directiva para sacar adelante la novena y terminar en buena posición la primera vuelta.
Hoy quizá sea necesario entrar al vestidor local para percatarse de que no existen problemas internos en el seno del equipo y fue ahí en el interior de ese lugar en donde Gerardo Sánchez, con la frente en alto accedió a la plática, en donde pronunció palabras que dan una clara muestra del compromiso que siente con el público y la organización.
El propio manager de Vaqueros Laguna se define como un ganador y así lo demuestran los números a lo largo de su trayectoria, aunque Gerardo sabe que apenas empieza una nueva etapa en el beisbol, la de manager, en donde confiesa haber aprendido mucho de don José ?Zacatillo? Guerrero. Fue precisamente este lagunero el que lo animó para aceptar el reto de dirigir al equipo de Torreón, porque si el nombre de Gerardo Sánchez está escrito con letras de oro por lo realizado como pelotero, por qué no pensar en un futuro exitoso en la difícil profesión que apenas inicia.
Gerardo Sánchez tampoco se explica la negativa de José Herrera para jugar con Vaqueros Laguna, porque es testigo de los esfuerzos que hizo la directiva para traer al pelotero dominicano. El estratega nacido en Guasave, Sinaloa, sabe perfectamente lo que Boi Rodríguez puede dar a la organización, luego de un arranque lento en Campeche, en donde nunca pudo sentir la comodidad que un profesional requiere para entregar buenas cuentas.
El estratega de Vaqueros no pierde el piso y sabe que de mantenerse los malos resultados podría dejarlo fuera de la organización, pero los actuales no son tiempos de pensar en eso, sino de ver hacia el frente y después de dar la confianza a sus peloteros, esperar que las buenas rachas hagan su aparición.
A lo largo de una larga y exitosa carrera como pelotero, cuántas malas rachas no habrá enfrentado Gerardo Sánchez, la situación que hoy vive no es desconocida para él y así con en la actualidad los momentos amargos se hacen presentes, también conoce y en demasía, el sabor dulce de la miel que suele aparecer cuando las cosas salen como se quiere.
De frente, como debe hacerse, Gerardo Sánchez respondió ampliamente a cada una de las preguntas y al referirse a la situación de Héctor Chavarría, sencillamente dijo que el lanzador recibió una oportunidad más como inicialista debido al buen trabajo que había realizado en el arranque de la temporada; hoy las cosas no son del todo favorables para el lanzador derecho y se piensa que incluirlo entre los relevistas podría traer consecuencias positivas a muy corto plazo.
Vaqueros Laguna fue un equipo sólido en el arranque de la temporada, gracias al buen trabajo del pitcheo, el cual se ha visto afectado por la aparición de las dobles jornadas dominicales. Sobre este importante tema Gerardo habla de un plan elaborado entre directiva y cuerpo técnico para buscar que cada uno de los cinco abridores trabaje, hasta donde sea posible, con sus días de descanso adecuados. Hoy es el caso de Francisco Madero, anunciado para el segundo juego de la doble cartelera, en una salida que se dará con tres días de reposo.
Actualmente se puede decir que Vaqueros Laguna es como una embarcación que navega entre la turbulencia, pero más que nunca el capitán de la nave está al frente de la misma y asume su responsabilidad ante la obligación de alcanzar buen puerto. Como cabeza de la nave, Gerardo Sánchez mueve sus piezas en busca de encontrar tanto el orden al bat ideal como la rotación de pitcheo que mejor convenga a los intereses del equipo, en vista de que la profundidad del arranque de la campaña hoy no parece estar presente.
No es una labor sencilla porque enfrente hay otros siete equipos de la Zona Norte dispuestos a tener una temporada exitosa; cada uno de los rivales se ha reforzado y así se hable del último lugar del standing, también ahí se encontrarán dificultades para ganar, porque el grupo norteño, contra lo que se diga, no será fácil para que Vaqueros encuentre el camino al play off.
Analizar el roster del conjunto lagunero da como resultado un plantel de calidad; tener acceso a la intimidad del vestidor enseña un buen ambiente en el grupo y, platicar con Gerardo Sánchez transmite una confianza muy positiva que permite pensar en que las cosas pronto serán diferentes.
Si los resultados no se dan, entonces será obligado voltear la cara a situaciones fuera de los límites de lo deportivo; hoy parece muy complicado darle la vuelta a la tortilla porque un equipo metido en racha negativa puede tener problemas para encontrar la confianza, esa que hoy les brinda el cuerpo técnico y la directiva, en busca de ser un frente común en donde cada marinero ponga lo mejor de sí para llegar a la tierra prometida.
