NAMUR, BÉLGICA.- El australiano Robbie McEwen se adjudicó ayer la segunda etapa del Tour de Francia, de 197 kilómetros, mientras que el estadounidense Lance Armstrong, el gran favorito, pasó otro día tranquilo en las traicioneras carreteras de Bélgica.
El estadounidense, que anhela una sexta victoria sin precedentes, avistó a sus rivales con un rendimiento brillante en el prólogo y espera mantenerse confortablemente escondido entre el pelotón principal hasta la contrarreloj por equipos del miércoles.
McEwen, quien terminó por detrás del estonio Jaan Kirsipuu el domingo en la primera etapa, no cometió ningún error ayer en la última etapa belga en este Tour.
"No es una revancha", dijo McEwen. "Ayer me quedé un poco corto aunque estoy seguro que fui el más fuerte también".
"Arranqué en el último tramo y cuando vi la señal de 200 metros a meta sabía que era mi día", agregó.
Thor Hushovd, tercero en Charleroi en la etapa del domingo, fue segundo y se catapultó al primer puesto de la clasificación general, convirtiéndose en el primer noruego en los 101 años de la carrera en llevar puesto el codiciado maillot amarillo.
"He cumplido dos de mis sueños tras vestir el maillot verde (de la clasificación por puntos) y ahora el maillot amarillo", dijo Hushovd.
"Ahora espero que pueda ganar la etapa de mañana", añadió sobre la de 210 kilómetros de hoy martes entre Waterloo y Wasquehal.
El francés Jean-Patrick Nazon fue tercero en el sprint final, retrasado por una espectacular caída a 20 metros de la meta en la que se vieron envueltos el noruego Kurt-Asle Arvesen y el francés Jimmy Casper.
Hushovd aventaja al suizo Fabian Cancellara por ocho segundos. McEwen está tercero a 17 segundos.
El vigente campeón Armstrong es cuarto a 18 segundos.
El texano se vio envuelto en una caída masiva en la primera etapa el año pasado y siempre ha dicho que le atemorizan los peligros y el nerviosismo de las primeras etapas del Tour.
Sus temores de nuevo se confirmaron. Antes de la caída final por un choque entre Arvesen y Casper, dos corredores se habían visto obligados a abandonar el Tour ayer.
El australiano Nick Gates terminó fuera de control el domingo en la primera etapa tras una lesión grave en su rodilla, mientras que el italiano Gian Matteo Fagnini se cayó y se rompió la clavícula.
McEwen dedicó su victoria a Gates, compañero suyo en el equipo Lotto-Domo y a su anterior compañero de equipo Steve Vermaut, que falleció de un ataque al corazón la pasada semana.
