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SAO PAULO, BR.- El cineasta Roman Polanski afirmó ayer en Sao Paulo que no tiene claro si la guerra de los Estados Unidos contra el terrorismo ha generado en el resto del mundo una oposición a las políticas de ese país, o sólo a la figura de su presidente George W. Bush.
?Me pregunto si eso es antiamericanismo o antibushismo?, expresó el director de origen polaco en una rueda de prensa en Sao Paulo, donde asiste como invitado a la Muestra Roman Polanski, en la que hasta mañana jueves se exhibirán 13 de sus largometrajes.
Según Polanski, después de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, ?hasta el estadounidense medio ha tenido dificultades para saber lo que ocurre con ellos mismos?.
Polanski, que desde los años 70 está prófugo de la justicia estadounidense, que lo consideró culpable de la violación de una menor, aseguró que pese a sus problemas judiciales su trabajo es reconocido en ese país.
?Existe en Estados Unidos un gran número de cineastas que aprecian mi trabajo?, dijo y recordó que el año pasado, cuando fue galardonado con el Oscar al Mejor Director por su película El Pianista, fue aplaudido de pie en la gala de entrega de los premios, pese a que no estaba presente en el auditorio.
El director de 70 años agregó que después de ganar el Oscar por El Pianista, centrada en la vida del pianista Wladyslaw Szpilman que sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial, le gustaría hacer una película sobre niños, para lo cual ha estado pensando en un libro que haya amado en su infancia.
Señaló que aunque las tramas de suspenso y la angustia están presentes en sus películas, no tiene obsesión por ningún tema y todo lo que lleva a la pantalla depende de su estado de ánimo.
?La angustia (en las películas) es una coincidencia. Soy producto de una ciudad y de las angustias relacionadas con el mundo urbano y no de la selva. No soy Caperucita Roja?, señaló.
Polanski, de origen judío y sobreviviente del ghëto de Cracovia, del que escapó a los siete años de edad para no ser enviado a un campo de concentración como en el que murió su madre, señaló que nunca se ha interesado mucho por el judaísmo.
?Después de que huí del ghëto fui educado por cristianos y crecí en un ambiente cristiano?, anotó.
Al ser preguntado sobre la opinión que le merece la polémica cinta La Pasión de Cristo, del estadounidense Mel Gibson, dijo que no puede hacer comentarios porque no la ha visto.
En la rueda de prensa, Polanski recibió como regalo de un admirador una camiseta de la selección brasileña de fútbol, que se enfundó inmediatamente, tras preguntar a qué equipo pertenecía la prenda de color azul, el segundo uniforme de la ?verde-amarela?.