EFE
WASHINGTON, EU.- El secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, propuso al presidente estadounidense, George W. Bush, bombardear Irak inmediatamente después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, según un ex asesor de la Casa Blanca.
Richard Clarke, que era el coordinador antiterrorista el día de los atentados que costaron la vida a más de tres mil personas en EU, afirma en un libro que se publicará próximamente que, desde el principio, la Casa Blanca quiso vincular a Irak con el 11-S.
En su libro Clarke relata que pese a que los principales miembros del Gobierno estaban convencidos de que el autor de los atentados era el grupo terrorista Al Qaeda, “Rumsfeld decía que teníamos que bombardear Irak”.
“Pero todos nosotros le decíamos que no, que Al Qaeda estaba en Afganistán”, explica el ex asesor de la Casa Blanca, quien añade que el jefe del Pentágono argumentaba que “no hay buenos objetivos en Afganistán y hay muchos buenos objetivos que atacar en Irak”.
Clarke aseguró durante una entrevista televisiva que el Gobierno buscó inmediatamente una conexión entre el 11-S y Bagdad.
“Pienso que querían creer que había una conexión”, dice este experto estadounidense en la lucha antiterrorista, quien aclara que “simplemente no existe esa conexión. No hay ninguna evidencia en absoluto de que Irak estuviese apoyando a Al Qaeda”.
Los supuestos contactos entre el régimen de Saddam Hussein y el líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, han sido utilizados por Washington como argumento para justificar la invasión de Irak tras la incapacidad para encontrar las armas de destrucción masiva.
También está sirviendo a Washington para argumentar que los continuos actos de violencia que ocurren en Irak son obra de grupos terroristas extranjeros y no de un movimiento de resistencia.
Clarke también critica con dureza al presidente George W. Bush porque, según asegura, no hizo nada durante sus primeros meses en la Casa Blanca para abordar la amenaza del terrorismo.
“Francamente, me parece escandaloso que el Presidente se presente a la reelección sobre la base de que ha hecho cosas magníficas contra el terrorismo (...) Lo ignoró. Ignoró el terrorismo durante meses, cuando quizá pudo haber hecho algo”, señala.
Clarke, que se jubiló a principios de 2003 después de 30 años de carrera en el Gobierno -dedicado desde 1992 a cuestiones relacionadas con el terrorismo-, comparecerá el próximo martes ante el comité federal que esta analizando los atentados del 11-S.