Al defender el presidente Fox la aspiración presidencial de su esposa Marta Sahagún amenaza la estabilidad política, asegura la oposición.
06 de julio 2004.
México, (EFE).- La determinación del presidente de México, Vicente Fox, de defender la aspiración presidencial de su esposa, Marta Sahagún, causa desencuentros y choques con su gabinete y amenaza la estabilidad política, coincidieron dirigentes opositores.
Este lunes se dio a conocer la renuncia del secretario particular y portavoz de Fox, Alfonso Durazo, en la que cuestiona que el presidente esté empeñado en promover la candidatura de Sahagún.
El ex embajador de México ante las Naciones Unidas, Adolfo Aguilar Zínser, señaló que la renuncia de Durazo revela la grave descomposición que existe en el Gabinete, que se olvida de las tareas del Gobierno y se entretiene en intrigas palaciegas.
"Creo que estamos viviendo en una crisis de gran envergadura", advirtió el ex diplomático: "Ojalá haya capacidad de respuesta, porque lo que está en juego es el futuro del país, no la candidatura presidencial de la esposa de Fox", añadió.
Aguilar Zínser dejó su cargo en noviembre pasado después de que el presidente Fox descalificara públicamente sus declaraciones de que EU siempre había considerado a México su patio trasero.
Para el ex diplomático "este Gobierno ya llegó a su límite" y la renuncia de Durazo "ahonda la crisis de descomposición en el Gobierno", por lo que urge que Fox ofrezca una respuesta para solucionar esta crisis a fin de tratar de recuperar el apoyo y la confianza de la opinión pública.
Advirtió que no es justo que Fox se dedique a promover las aspiraciones presidenciales de su mujer cuando los mexicanos lo eligieron para que atendiera los problemas del país, como la inseguridad, la generación de empleos y las reformas estructurales.
En su carta de renuncia, el ex portavoz presidencial señaló que "el país no está preparado para que el Presidente deje a su esposa de presidenta", y advirtió que "de ese coqueteo político derivan muchos de los desencuentros que hoy conoce el país".
Durazo agregó que "por razones históricas es nula la tolerancia de los mexicanos a tentaciones dinásticas. Por tanto, no me sorprendería que las reacciones llegaran incluso a la violencia política".
Por su parte, el senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Raymundo Cárdenas, destacó que la renuncia de Durazo confirma la opinión generalizada de que el Gobierno utiliza los recursos públicos para promover a su esposa.
"Vemos ahora ya una ratificación de la certeza de ese juicio que estaba en el ambiente político y popular, esto es muy delicado", señaló el legislador.
A su vez el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Gutiérrez, dijo que Durazo confirmó en su escrito que el gobierno de Fox toma sus decisiones a partir de los índices de popularidad.
"El populismo es hermano de la anarquía y, en ese sentido coincido con los motivos expuestos en la carta de renuncia de Alfonso Durazo: no se puede gobernar pensando sólo en los niveles de popularidad y haciendo a un lado los principales problemas de país", señaló el legislador.
La renuncia de Durazo fue minimizada por destacados políticos del Partido Acción Nacional (PAN), quienes negaron que represente una crisis dentro del gobierno foxista.
El senador Diego Fernández de Cevallos negó que la renuncia implique falta de unidad en el gobierno federal, pues "hasta donde recuerdo en todos los gabinetes presidenciales se dieron múltiples renuncias y ésta forma parte de un contexto político en donde unos entran y otros se van".
Por su parte, el ex ministro de Energía Felipe Calderón, que fue censurado por Fox por participar en un acto electoralista, negó que haya una crisis dentro del Gabinete y aseguró que se trata de una simple recomposición del equipo.
El senador del PAN, Juan José Rodríguez Prats, afirmó que la renuncia de Durazo es reflejo de una normalidad democrática que demuestra que ya se acabó el autoritarismo.
