PARIS, francia.- Es difícil imaginar una película que provoque tales reacciones encontradas entre judíos y cristianos como La Pasión de Cristo, de Mel Gibson, la historia de las últimas 12 horas en la vida del Mesías.
Suena como si estuvieran viendo dos filmes diferentes, y de cierta manera, lo son. Mientras Gibson ofrece un preestreno tras otro a seleccionadas audiencias religiosas, un patrón de ?pros y contras? está surgiendo claramente en sus comentarios.
Gibson, cuyo filme refleja su tradicionalista fe católica, predijo el miércoles que la polémica podría aumentar una vez que su película se estrene ampliamente el 25 de febrero, cuando se conmemora el Miércoles de Ceniza.
?Anticipo que lo peor está por venir?, dijo el actor/director australiano a 4,500 pastores evangélicos en una exhibición en Orlando, Florida. ?Espero estar equivocado. Espero estar equivocado?.
Gibson hizo la película para mostrar con grotescos detalles cómo murió Jesucristo para redimir a la humanidad, una doctrina central de la creencia cristiana. Pero la Pasión -palabra latina que significa sufrimiento- también podría ser vista como la historia de cómo los judíos conspiraron para matar al Redentor.
Se había reportado que el Papa Juan Pablo II aprobó la película, pero funcionarios del Vaticano desmintieron eso y se movieron el jueves a mitigar el creciente debate sobre esas versiones, al decir que el pontífice no tenía el hábito de hacer opiniones públicas sobre lo artístico.
Judíos recelosos
Los líderes judíos han estado diciendo por meses que cualquier filme basado en las narraciones de los Evangelios sobre la vida y muerte de Jesús comprometía la imagen de los judíos como los asesinos de Cristo, y desataría una corriente antisemita.
?Hay representaciones problemáticas de los judíos en la película, dijo el rabino David Sandmel de Chicago después de asistir a otra exhibición previa del filme el miércoles.
?El papel de los judíos (...) en el ?juicio? y la ejecución de Jesús es exagerada?, dijo el rabino al diario Chicago Sun-Times.
Los cuatro Evangelios sostienen que el Sanedrín, -la jefatura religiosa judía de esa época- se opuso a este nuevo predicador rebelde y pidió a las poderosas fuerzas de ocupación romana que lo ejecutaran.
Los espectadores judíos verán más detalles que sólo se dan en algunos Evangelios, por ejemplo, la escena en la que Mateo describe cuando una multitud de judíos exige la crucifixión de Cristo y grita: ?Su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos?.
Pasajes como ese -regularmente resaltados en obras de La Pasión que florecieron en la edad media- fueron semillas de décadas de antisemitismo cristiano antes del Holocausto, un horror que no puede estar lejos de las mentes de los espectadores judíos.
Cristianos conmovidos
En contraste, está la entusiasta reacción de los cristianos creyentes que ven en La pasión de Cristo la prueba de que Dios amaba a la humanidad tanto que ofreció a su hijo para salvarla del pecado.
Para explicar cuán profundamente el sufrimiento de Cristo puede conmover a los cristianos que vean la película, un estudioso bíblico de alto rango comparó su reacción a la de los estadounidenses que vivieron la tragedia de los atentados del World Trade Center en Nueva York en septiembre del 2001.
?Esto tiene una profunda resonancia emocional para los cristianos, es como la emoción del 11 de septiembre?, dijo el padre Donald Senior, presidente de la Unión Teológica Católica de Chicago y miembro de la Comisión Bíblica Pontificia del Vaticano.
Los cristianos creyentes reaccionan a la Pasión ?como la gente respondería ante el bombero y la policía que va y ofrece sus vidas tratando de salvar personas (...) hay mucha violencia, pero también la nobleza y belleza del autosacrificio?, afirmó.
Entre los cristianos que alaban el filme están Ted Haggard, jefe de la Asociación Nacional de Evangélicos en Estados Unidos, y varios cardenales católicos.