MONTERREY, NL.- En un hecho sin precedentes, Pablo Hermoso de Mendoza se llevó la sorpresa de su carrera taurina luego de infartarse el último toro de la ganadería Golondrinos durante la corrida de ayer en el Cortijo San Felipe.
El rejoneador español se presentó ayer por la tarde en el Cortijo San Felipe junto con Jorge Gutiérrez y Hernán Ondarza, en una corrida a beneficio de Vida y Familia Monterrey AC.
Pablo Hermoso y Jorge Gutiérrez cortaron una oreja cada uno, mientras que Hernán Ondarza se fue en blanco.
"Es muy lamentable que haya sucedido este accidente, salió el toro y sin golpearse contra nada se quedó en medio, empezó a perder un poco la mirada, se acostó y murió, fue todo rapidísimo", dijo sorprendido el español.
Agregó que el público entendió que este hecho le puede suceder a cualquier animal y a cualquier persona, "además lo importante en la corrida de hoy era la participación a beneficio, en la cual se cumplió con el objetivo".
Hermoso de Mendoza salió descontento por no haberse enfrentado a la totalidad de los toros, pues aseguró que como profesional desea que la afición salga satisfecha de la plaza, aunque ratificó que lo importante fue la respuesta a un llamado de ayuda para quien lo necesita.
