26 de eneroi de2004.
Manchester (EU), (EFE).- El Partido Demócrata de EU busca en las primarias de mañana en el Estado de New Hampshire al candidato capaz de derrotar al presidente norteamericano, George W. Bush, en las elecciones de noviembre, y el senador John Kerry se presenta como el gran favorito.
Kerry, claro vencedor de los "caucus" de Iowa de la semana pasada, marcha cómodamente al frente de todos los sondeos de intención de voto en New Hampshire, y otra victoria suya podría dejar prácticamente sentenciado el proceso.
Además, el senador por Massachusetts es el primer demócrata que ha logrado superar a Bush en una encuesta, según un sondeo a escala nacional de la revista Newsweek.
La encuesta coloca a Kerry con un 49 por ciento de las preferencias, frente a un 46 por ciento de Bush, y además el presidente sufre una nueva erosión en la apreciación de su trabajo al frente del país.
"Creo que los votantes irán en favor de quien tiene posibilidades de derrotar a George Bush", declaró Kathleen Sullivan, presidenta del Partido Demócrata de New Hampshire, quien debido a su cargo mantiene una posición neutral en la votación de mañana.
Según avanza la campaña, Kerry está encontrando el tono adecuado para criticar a Bush, sobre todo por la guerra de Irak, a pesar de que el senador demócrata votó a favor del uso de la fuerza contra el régimen de Saddam Hussein a finales de 2002, algo que sentó mal a la base de su partido.
Por ejemplo, Kerry está capitaneando la ofensiva contra Bush ante el reconocimiento de varios responsables del Gobierno de que las armas iraquíes de destrucción masiva que Washington usó para justificar la guerra de Irak podrían no haber existido. "Fuimos engañados", acusó claramente Kerry este domingo.
Inicialmente, fue Howard Dean, ex gobernador de Vermont, el primer demócrata que comenzó a criticar abiertamente a Bush durante la precampaña. Las duras críticas de Dean a la guerra de Irak y su carácter diferente al de los demás políticos al uso le pusieron al frente de las encuestas de intención de voto en estas primarias, pero su campaña ha ido perdiendo gas poco a poco.
"Cuando los votantes demócratas se fijaron un poco más, parece que consideraron que no es Howard Dean el que puede derrotar a Bush, sino John Kerry o tal vez John Edwards", indicó Allan Lichtman, profesor de Gobierno en American University (Washington) especializado en cuestiones presidenciales.
Dean une a grandes cualidades -elocuencia, capacidad de atraer a los jóvenes y a gente desinteresada en la política- su propensión a meter la pata, además de algunas propuestas que pueden parecer poco electoralistas, como dar marcha atrás a todas las rebajas de impuestos de Bush. Por ello, los demócratas tienen dudas acerca de si Dean es el mejor rival para sacar a Bush de la Casa Blanca.
Por ello, parece que se inclinarán por alguien más moderado capaz de ganarse los votos del centro político, en el que recae la victoria final. El general retirado Wesley Clark contaba con que Dean ganara los "caucus" de Iowa para poder postularse como el candidato "anti-Dean", pero la inesperada victoria de Kerry allí le ha robado su mejor oportunidad.
En cuanto al senador Joe Lieberman (Connecticut), candidato a la vicepresidencia en el año 2000, "está acabado y sólo es cuestión de tiempo" que se dé cuenta y abandone la campaña, según Lichtman. En esta situación, sólo Edwards, senador por Carolina del Norte, parece capaz de plantar cara a Kerry.
Con un mensaje populista y lleno de optimismo, Edwards aprovecha su experiencia como abogado y su telegenia para pregonar un mensaje articulado que está calando bien. Nacido y criado en el sur del país, New Hampshire no es territorio para Edwards, ya que Dean y Kerry vienen de estados vecinos a New Hampshire y son muy conocidos aquí.
Sin embargo, un buen resultado en este Estado aumentaría las posibilidades de Edwards en los siete estados que votan el martes 3 de febrero, varios de los cuales son del sur.
Por ejemplo, Edwards figura en cabeza de las encuestas de intención de voto de Carolina del Sur. Suponiendo que Kerry gane mañana, la principal cuestión es su margen de ventaja y quién queda en tercer o cuarto lugar, ya que ello podría suponer el final de alguna campaña, con Lieberman como el hombre más en peligro.