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Berlín, Alemania.- El Banco Central Europeo (BCE) fijó ayer en Frankfurt el valor de referencia del euro en 1.3146 dólares, la cotización más alta establecida hasta ahora desde el inicio de la Unión Monetaria en 1999, con lo que el dólar costó 0.7607 euros.
La moneda europea continuó con su ritmo ascendente, superando los valores alcanzados durante la jornada de un día anterior, cuando por momentos costó 1.3105 dólares, aunque al final el curso de referencia fue fijado en 1.3089 dólares.
En el mercado de divisas de Frankfurt, desde las primeras horas de ayer, el euro comenzó su ascenso y sobrepasó de manera constante la marca de los 1.31 dólares hasta que el BCE fijó el valor de referencia más alto alcanzado hasta ahora.
Desde finales de octubre pasado la moneda europea subió al menos tres céntimos respecto al dólar.
En relación a otras divisas de referencia internacional, el BCE fijó el valor del euro en 0.6985 libras británicas (por debajo de las 0.6995 del martes); 135.26 yenes japoneses (arriba de 134.81 de ayer) y 1.5143 francos suizos (por abajo de 1.5150 de la jornada previa).
La moneda estadounidense costó 0.7607 euros, menos de los 0.7640 de un día anterior, con lo que continuó la debilidad general del dólar.
Analistas de la consultoría Informa Global opinaron en Frankfurt que para reducir su enorme déficit en el presupuesto público y en la balanza comercial, Estados Unidos considera indispensable que su moneda siga devaluándose.
El dólar pierde valor en los mercados financieros no sólo frente al euro, sino también frente a otras monedas como el franco suizo o el yen japonés.
Las previsiones apuntan a que el euro seguirá subiendo, e incluso es posible que alcance o supere el nivel de los 1.50 dólares, según analistas del banco alemán de inversión Deka Bank.
Los movimientos cambiarios tienen amplias repercusiones en la política, como se observó en la Conferencia del Grupo de los 20, cuando se pidió la aplicación de medidas a Estados Unidos para nivelar sus desequilibrios y frenar el alza del euro frente al dólar.
Estados Unidos, al parecer, no pretende cambiar su política económica para que el curso del dólar se mueva en dirección contraria, porque considera que un dólar débil contribuye a la reducción de sus déficits.
En Europa, autoridades de la mancomunidad ya advirtieron del peligro que supone esta situación para las exportaciones europeas, que se ven encarecidas en los mercados estadounidenses, mientras las de ese país se abaratan para Europa.