Alemania, España y Francia juntos por la financiación europea y contra el terrorismo, especialmente el de ETA.
29 de abril 2004.
París, (EFE).- España y Francia abrieron hoy una nueva etapa, con la promesa de Jacques Chirac a José Luis Rodríguez Zapatero de que París, Berlín y Madrid avanzarán ahora "cogidos de la mano" en la construcción europea y frente a problemas internacionales como Irak y el Oriente Medio.
Tras su primer encuentro en París, marcado por una cordialidad evidente, el nuevo presidente del Gobierno español y el jefe de Estado francés dejaron claro que se ha pasado la página de los desacuerdos sobre la guerra de Irak y la futura Constitución europea que enturbiaron las relaciones el año pasado, bajo el anterior Gobierno de José María Aznar, y que ahora prima la voluntad de superar las divergencias por el diálogo donde las haya.
En rueda de prensa conjunta tras su reunión y antes de que los dos se sentaran a cenar en el Elíseo con sus respectivos ministros de Exteriores y colaboradores, Chirac deseó que, tras su paso por Berlín ayer y París hoy, Rodríguez Zapatero vuelva a Madrid sabiendo que en ambas capitales existe la "voluntad muy fuerte de avanzar cogidos de la mano con España en la ruta europea".
Ello debe enmarcarse en una "cooperación sincera y leal", que exige que cada cual defienda sus intereses en un espíritu de "concertación y diálogo", y no de confrontación, que no da resultados, agregó.
El jefe del Ejecutivo español constató numerosos "elementos comunes" en grandes cuestiones para Europa, "la visión del mundo" y las relaciones bilaterales, y vio en el encuentro y la cordialidad de su anfitrión "el mejor punto de partida" para recuperar del todo el entendimiento entre los dos países para trabajar por una Unión Europea "activa, dinámica, fuerte y sin recelos".
Rodríguez Zapatero apostó por que ésa sea " la mejor" de las etapas en las relaciones entre los dos países.
En esta reunión, que sigue a la mantenida en Madrid el mes pasado tras los funerales por "las víctimas de la barbarie" (del 11 de marzo), en palabras de Chirac, el presidente del Gobierno español le agradeció la cooperación "intensa y permanente" de Francia en la lucha contra el terrorismo de ETA, una colaboración que "ha salvado muchas vidas españolas" y que es "un buen ejemplo" de lo que debe ser la lucha contra el terrorismo.
Chirac le aseguró que esa cooperación contra todas las formas de terrorismo, en particular el de ETA, continuará "sin reservas" de la forma "más eficaz posible": es "una posición firme del Gobierno".
El presidente francés, que habló de "nuestra visión común de la Europa de mañana", mostró su "satisfacción" por la voluntad de Rodríguez Zapatero de que España reencuentre el lugar "eminente y activo" que le corresponde en esa Europa, y ocupe también todo su lugar en el ámbito euromediterráneo y sea un elemento motor por "la paz y la solidaridad".
Los dos dirigentes han decidido que habrá "una cooperación constante y cotidiana" entre funcionarios de Francia, Alemania y España para resolver las divergencias, como la relativa a la financiación europea, aseguró Chirac.
"España defiende sus intereses y es legítimo", dijo Chirac, quien horas antes había reafirmado su deseo, compartido con Alemania -ambos países "contribuyentes netos, con problemas financieros"- de que el presupuesto comunitario se limite al 1 por ciento del Producto Interior Bruto de la UE.
Otra divergencia ha sido el sistema de voto en el proyecto de Constitución, que enfrentó a Francia y Alemania con España y Polonia.
Zapatero confirmó que, en un cambio con el Ejecutivo anterior, acepta el sistema de doble mayoría y ahora "queda tiempo para el diálogo y la concreción de las aspiraciones que tiene España en cuanto al porcentaje de la representación de la población".
Al mismo tiempo se mostró convencido de que se logrará un consenso: "Por España no va a quedar que se realice el máximo esfuerzo" para la adopción de la Carta Magna en este semestre.
Con respecto a Irak u otros problemas desde el Magreb hasta el Oriente Medio, Chirac abogó por que sea "fuertemente reforzada" la concertación entre los representantes de Francia, Alemania y España, en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Rodríguez Zapatero indicó que la recuperación por Irak de su soberanía tomará "tiempo", debido a la situación política, militar y de seguridad, pero espera que el Consejo de Seguridad consiga que ese tiempo sea "cada día menor" y esa soberanía se recupere "de manera progresiva", aunque, inicialmente, sea de forma parcial.
Unas horas antes, Chirac había afirmado que la única salida en Irak es una verdadera transferencia de la soberanía "bajo el control efectivo de la ONU", y había advertido de que sería "desastroso" una fórmula de compromiso en la que la ONU llevase el "sombrero" pero la coalición siguiera teniendo "la realidad de los poderes".