México, (Notimex).- Especialistas del Hospital General del Centro Médico Nacional La Raza separaron con éxito a unas siamesas de siete meses, que estaban unidas por el tórax y el abdomen, gracias a los avances de la biotecnología.
En conferencia de prensa, el director de la citada institución, Jaime Zaldívar Cervera, quien encabezó a un grupo de 12 especialistas que efectuó esta intervención, explicó que la cirugía implicó alto de riesgo, toda vez que las pequeñas carecían del tórax anterior y compartían el hígado, el cual tuvo que ser dividido entre las dos.
Expuso que sus corazones e hígado fueron recubiertos con injerto de pericardio de bovino y la parte posterior de los pulmones se cubrió con su propia plura (membrana) y la anterior quedó en contacto con una malla de titanio que les fue colocada para reemplazar la caja torácica y los músculos.
Lo anterior, explicó, porque carecían de los arcos anteriores de las costillas.
La malla metálica, importada de Alemania, se fijó a los arcos costales posterolaterales y a la clavícula con 25 tornillos y se cubrió con piel de ellas mismas, la cual fue estirada mediante unos expansores que en 32 días la hicieron crecer cinco centímetros de cada lado.
El cirujano señaló que la operación duró 10 horas, y tras éstas, las niñas se encuentran estables y en recuperación, no obstante señaló que las pequeñas deberán aprender a respirar y a mover la malla, que sustituirá las funciones del tórax, a través de los músculos costales.
Mientras se adaptan a su nueva vida, las pequeñas, de las que no se dio a conocer su nombre, a petición de sus padres, requerirán de ventilación asistida mediante entubación, la cual ya le fue retirada a una de ellas, dado que ya puede respirar por sí misma y se prevé que la otra lo hará en los próximos días.
Zaldívar Cervera, acompañado por el equipo de cirujanos y médicos pediatras que intervinieron en esta operación, consideró que las niñas tendrán la malla de titanio unos dos años, tiempo en que crecerán un poco sus costillas y en forma paulatina será sustituida por injertos costales propios, y de ser necesaria se pondrá otra malla, hasta que queden con tórax y abdomen formado.
El director del Hospital General del Centro Médico La Raza, comentó que la planificación de la operación duró seis meses y se decidió a operarlas para separarlas, toda vez que existían las mismas posibilidades de vida para las dos.
Refirió que la intervención quirúrgica se efectuó con éxito el pasado 26 de abril y el procedimiento se hizo con el consentimiento firmado por los padres de los pequeñas, además de que fue autorizado por el Comité de Bioética del Hospital General, reconocido por el Consejo de Bioética de México.
El médico señaló que se da un caso de estos por cada 100 mil nacimientos, pero sólo en 71 por ciento de ellos puede procederse a la separación.
Esta es la primera operación de este tipo que se efectúa en el país con éxito y la sexta a nivel mundial, tomando en cuenta que la última fue en el año 2001.