EFE
BAGDAD, IRAK.- Las fuerzas de Estados Unidos retrocedieron ayer sus posiciones en el centro de Nayaf, pese a que la milicia leal al clérigo radical shii Muqtada Al Sadr controlaba la gran mezquita y dejaba claro su intención de seguir protegiéndola con sus armas.
Después de casi 24 horas de asedio, las tropas estadounidenses retiraron los tanques y vehículos blindados que bloqueaban varias de las calles que desembocan en el mausoleo, situado en el corazón del casco antiguo de la ciudad.
Aunque la situación en Nayaf era de relativa calma, a lo largo del día se produjeron esporádicos enfrentamientos entre la milicia shii y los marines cerca del cementerio, sobre el que un helicóptero Apache disparó varios misiles.
Los milicianos leales a Al Sadr patrullaban armados los aledaños del mausoleo, y montaban guardia en los controles levantados en los accesos a la mezquita, aprovechando el repliegue de los soldados estadounidenses.
El gobernador de Nayaf, Adnam Al Zurfi, indicó que el Gobierno estudiaba la posibilidad de enviar una delegación oficial con el finalidad de entablar conversaciones con Al Sadr, quien en las dos ocasiones anteriores, ha rechazado entrevistarse con representantes o emisarios del Ejecutivo.
La solución de la crisis de Nayaf continuaba ayer ligada al resultado de las negociaciones entre los representantes de Al Sadr y el entorno del ayatola Alí Sistani, el líder religioso shii con mayor prestigio y quien se encuentra en Londres recuperándose de una intervención quirúrgica.
“El Ayatola Sistani ha puesto condiciones para aceptar las llaves por medio de sus representantes en Nayaf”, dijo el jeque Alí Al Smeisin, uno de los cinco consejeros del clérigo rebelde.
En el mausoleo se guardan documentos antiguos, oro, joyas, y otros objetos considerados de enorme valor para la comunidad shii de todo el mundo.
El jeque Al Smeisin explicó que antes de aceptar las llaves, los representantes del ayatola Sistani quieren inspeccionar el mausoleo con el fin de comprobar que los tesoros no han desaparecido, y que la milicia ha abandonado el santuario.
En ese sentido, Ahmad Al Shibani, portavoz político de Al Sadr, aseguró que la milicia seguirá protegiendo el santuario después de que se complete el traspaso de su custodia a las autoridades religiosas shiies.
“El Ejército del Mahdi continuará defendiendo el santuario y Nayaf”, destacó Al Shibani en declaraciones a la prensa.
La retirada de la milicia de Nayaf y su desarme, son las dos principales demandas hechas a los rebeldes shiies por el Gobierno interino del primer ministro Iyad Allawi, que además quiere que el Ejercito del Mahdi se transforme en una organización política.
“A los americanos no se les permitirá estar en Nayaf”, añadió el portavoz del clérigo radical.
Al Shibani apuntó que confiaba que el traspaso de la custodia del mausoleo da las autoridades religiosas, sea la solución a la crisis, e instó al Gobierno interino a que prescinda del empleo de la fuerza.
“El Gobierno de Allawi debe perseguir una solución pacifica, no militar para el beneficio de los americanos”, declaró.
Al Shibani no precisó cuando podría formalizarse el traspaso de la custodia del mausoleo del imán Alí Ben Taleb.
Los milicianos shiies permanecen en el santuario de Nafaf a pesar del ultimátum dado el pasado jueves por Iyad Allawi, quien más tarde descartó que el asalto al mausoleo como solución.
Los enfrentamientos en Nayaf estallaron el pasado cinco agosto, casi dos meses después de que el Ejército del Mahdhi y las fuerzas de Estados Unidos pactaran unas tregua para poner fin a dos meses de cruenta lucha.
Al menos 98 iraquíes murieron y 75 resultaron heridos en Nayaf durante las últimas 48 horas, según los dados facilitados por el Ministerio de Sanidad.