Por Virginia Hernández
El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- Aún cuando el Gobierno ha estado muy estricto desde 1999 para no aumentar los salarios nominales más allá de la inflación, en los hechos, los incrementos de los salarios reales no han sido significativos, incluso en algunos casos no tuvieron un alza o bien, no fue mayor a cuatro puntos.
El comportamiento que se observó en Torreón no es nada positivo para los 68 mil asalariados que perciben entre uno hasta dos salarios mínimos. Las acciones del Gobierno Federal han operado no sólo por controlar la inflación a un dígito, similar a sus socios comerciales, sino también ha logrado pulverizar el poder de compra de los trabajadores con aumentos inferiores a la tasa inflacionaria, sin saber si el año entrante les saldrán debiendo o no.
En el estudio realizado por El Siglo de Torreón, se utilizaron variables como salario nominal de la zona económica C del país que da a conocer el Instituto Nacional de Estadística, Geogragía e Informática (INEGI), la tasa de inflación anual y el salario real.
Los movimientos de los salarios fueron significativos hasta 1998, posteriormente el aumento apenas rebasó en diez puntos en 2000.
La caída abrupta se observó en 1999, año en donde el incremento fue de 6.56 puntos. A partir de esa fecha comienza una tendencia decreciente, en donde las percepciones de los trabajadores en Torreón han venido de menos a menos.
Sin embargo, la contracción real se observó en los salarios reales ( salario nominal-inflación). Resulta interesante el ver que muchas familias han logrado sobrevivir con variaciones positivas de un 0.81 ó de 3.77 puntos anuales.
Al contrastar dichos resultados con el índice de inflación, los resultados son abrumadores, al ver que el comportamiento general de precios en la ciudad fue mucho mayor en proporción a la capacidad de compra de los asalariados.
Es por ello que muchas amas de casa se podrán explicar el porqué no les alcanza el dinero a la hora de ir al mercado a realizar las compras más indispensables para ese día. El dinero nominal de por sí es poco, pero el real es aún inferior al que se contabiliza en pesos y centavos.