SINGAPUR, 17 (Reuters) - Treinta y seis parejas comenzaron a competir en un certamen que hace retorcer el estómago: pasarse siete días dentro de las cabinas del teleféricos que penden sobre Singapur, en pugna por un premio de unos 25.000 dólares.
En el segundo día de competencia, diez parejas ya se habían bajado, varias después de vomitar, algo totalmente prohibido en el concurso "Sobrevive al Cielo", y otra después de que un participante de 31 años se viera afectado de diarrea.
Mientras las cabinas del teleférico se mueven entre Singapur y la cercana isla de Sentosa, cada pareja debe permanecer dentro de esas cajas flotantes, equipadas sólo con bancos y un sistema básico de intercomunicaciones, excepto un recreo de 10 minutos diarios en los que pueden salir a la estaciones.
No se les permite más de tres comidas y tres litros de agua por día, y se enfrentan a una serie de tareas que los pueden descalificar.
Cada cabina lleva a dos parejas. "Tuvimos esta mañana a una pareja que vomitó por todas partes, inclusive a la otra pareja", dijo Jasmine Ee, una portavoz de la firma Singapore Cable Car.
Los organizadores arrojan caramelos a las parejas para ver si rompen las reglas sobre las comidas, o los someten a desafíos sorpresa tales como hacerlos saltar en un pie durante el recreo.
Los equipos, provenientes de Singapur, Tailandia, Indonesia, Malasia, Hong Kong, y Corea del Sur, ganan o pierden puntos según las tareas. El equipo superviviente con la mayor cantidad de puntos gana el premio.
