Montreal, (Notimex).- Los papagayos son los "Einsteins" del mundo de las aves, con un cerebro grande y adaptado para la comunicación y el aprendizaje del lenguaje, afirma el biólogo canadiense Andrew Iwaniuk, de Alberta, Canadá.
En un artículo publicado en el número más reciente del Canadian Journal of Zoology, el investigador de la Universidad de Alberta, dio los resultados comparativos sobre el tamaño y la estructura de mil 400 cerebros de pájaros de todo el mundo.
Lo primero, según Iwaniuk, es que los papagayos tienen el cerebro más grande de todos los pájaros y, más importante, el volumen de la materia gris con relación al resto del cuerpo es equivalente a los chimpancés, gorilas y el resto de los primates no humanos.
El cerebro de los papagayos es grande, además, en las áreas dedicadas al aprendizaje del lenguaje y de la comunicación, y dijo a la Canadian Broadcasting Corp. (CBC) que "en algunas tareas pueden actuar en el mismo nivel de un niño de dos a tres años." En algunas tareas, según Iwaniuk, pueden superar a los chimpancés.
Dijo que efectúa, junto con su colega John Nelson, una comparación entre cerebros de papagayos y primates para tratar de aprender cómo funciona el cerebro humano y determinar si las regiones que intervienen en la producción del habla y el lenguaje son las mismas.
Opina que los pericos tienen "cualidades humanas" fascinantes, y que quienes los crían deberían tratarlos como si fueran niños, para permitirles que esas aves desarrollen su comportamiento social.
Algunos papagayos dominan con facilidad un gran vocabulario, de más de cien palabras, que las usan de forma apropiada y en el momento oportuno, además de cantar y silbar.
El propietario de una pajarería en la avenida Bernard, Montreal, que tiene varios pericos, dijo a Notimex que son pájaros muy curiosos y sociables, que no aceptan ser maltratados y que, cuando lo son, desarrollan un "carácter agrio" y se vuelven "iracundos".
Uno de los papagayos de la pajarería, de un año de edad, tiene tanta necesidad de contacto social que cuando el cliente que se acerca a él se aleja, chilla para atraer su atención.