Las mujeres forman la tercera parte del sustento económico del país y son el grupo más castigado financieramente, por lo que se estima, según estadísticas, que el sector femenino es el que se encuentra en condiciones de mayor pobreza en el país.
Silvia Casas Nevárez, directora del Instituto de la Mujer Duranguense (IMD), afirmó que de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, así como los datos que ofrece el Sistema Estatal de Indicadores de Género, se determina que en México el 30.9 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) son mujeres, que equivale a 11 millones de trabajadoras.
Las mujeres laboran dos de cada tres horas del trabajo total y perciben sólo la décima parte de los salarios y, lo más lamentable, sólo tienen el uno por ciento de las propiedades del país.
La pobreza y políticas de ajuste. También los recortes al gasto social tienen un mayor impacto en la mujer, por su situación económica. Las crisis financieras significan un incremento de baja calificación del sector, que sale a buscar trabajo para compensar la situación dentro de la familia.
Cada día se incrementa más el número de jefas de familia que deben hacerse cargo de la manutención. El 33 por ciento de los hogares son encabezados por jefas de familia, de las que más de la mitad corresponden al estrato de las personas trabajadoras marginales.
Del total de divorciadas, el 72 por ciento labora fuera de su hogar, el 40 por ciento son solteras y el resto tuvieron pareja. El 60 por ciento de las personas que laboran en una maquiladora son mujeres.
Consideró que, en este sentido, aunque el número de maquiladoras ha disminuido en el país, todavía siguen generando derechos por debajo de los laborales que requieren las mujeres, pues existen contratos mensuales o por periodos cortos de tiempo, para que no se creen derechos laborales. De este modo, las mujeres pueden ser despedidas sin ninguna remuneración.