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LA HABANA, CUBA.- El canciller cubano, Felipe Pérez Roque, dijo ayer que el objetivo de la visita a Cuba de su homólogo mexicano, Luis Ernesto Derbez, es zanjar la crisis diplomática bilateral, aunque se mostró “sorprendido” por las dudas de éste.
Derbez declaró el sábado a la prensa que el objetivo del encuentro de ayer era “normalizar las relaciones bilaterales”, aunque “no estoy seguro de cuál pueda ser finalmente el resultado” de la reunión.
El canciller mexicano llegó ayer a La Habana para una visita tras la cual se acordó el restablecimiento de los embajadores de ambos países. Pérez Roque recalcó que el objetivo de la reunión “es dar punto final” al acuerdo que ambos alcanzaron durante la Cumbre de la UE-Latinoamérica-Caribe celebrada en Guadalajara a finales de mayo pasado.
“Allí acordamos el retorno de los embajadores”, dijo el ministro cubano al referirse al incidente, en mayo pasado, cuando México ordenó la retirada de su embajadora en La Habana, Roberta Lajous y expulsó al representante cubano, Jorge Bolaños.
“Acordamos que los embajadores regresarían próximamente y que en unas semanas el ministro Derbez nos visitaría”, subrayó Pérez Roque, quien acompañó a su colega mexicano en una ofrenda floral al monumento al héroe de México Benito Juárez poco después de su arribo a La Habana.
Pérez Roque consideró que “el retorno de los embajadores de alguna manera es una señal del interés por al menos encauzar las relaciones”. Antes de la reunión, el canciller cubano se mostró convencido de que la visita de Derbez sería “suficiente” para abordar los temas pendientes.
La visita, anunciada desde hace semanas, había despertado una gran expectación en ambos países por la posibilidad de que contribuyese a restaurar las relaciones entre estos dos antiguos aliados que enfrentan ahora la peor crisis diplomática de unos vínculos centenarios.
La crisis diplomática estalló en pasado mayo con la retirada de los embajadores.
México reaccionó así a las críticas del presidente cubano, Fidel Castro, sobre la política exterior mexicana, la supuesta intromisión de “agentes” cubanos en asuntos internos de México y la valoración política que dio La Habana para deportar a un empresario mexicano involucrado en un escándalo de corrupción.
El empresario Carlos Ahumada fue detenido en la isla en marzo pasado y deportado por el Gobierno de la isla en abril con el comentario de que su caso era un asunto “eminentemente político”.
Durante su detención en la isla, las autoridades cubanas grabaron las revelaciones de Ahumada y divulgaron un video con parte de esas declaraciones.
Las relaciones entre México y Cuba comenzaron a deteriorarse desde que el conservador Vicente Fox asumió el poder en 2000.