Agencias
MÉXICO, DF.- La inflación de 0.09 por ciento que registró el país en la primera quincena de junio, menor al promedio del mercado, eleva la probabilidad de que el Banco de México (Banxico) mantenga su actual Política Monetaria, consideran analistas.
Para Manuel Guzmán y Ramón Hernández, analistas de IXE, la inflación registrada en la primera mitad de junio eleva la probabilidad de que se decida mantener el ?corto? monetario en 37 millones de pesos diarios, en la reunión que la Junta de Gobierno del Banxico realizará este viernes.
Señalaron que el comportamiento del nivel general de los precios al cierre del primer semestre del año será compatible con el objetivo de estabilidad de precios definido por dicho instituto, de tres por ciento más/menos un punto porcentual.
Consideraron factible que la inflación en junio se sitúe en 0.15 por ciento, con lo que en los primeros seis meses del año habría acumulado un incremento de 1.62 por ciento, dentro de la meta oficial.
En opinión de los analistas, el Banxico considera otros factores al momento de determinar el sesgo de su política monetaria este viernes, como el nivel de las tasas de interés, las cuales en la actualidad se mantienen elevadas, lo que es consistente con la estrategia de preservación de la estabilidad de los precios del Banxico.
También toma en cuenta la expectativa promedio de inflación para el año por parte de los analistas, la cual bajó luego de los incrementos en el ?corto? monetario, aunado a la disminución de las presiones al alza en el tipo de cambio.
A principios de semana, Grupo Financiero Santander Serfin había previsto que con un buen dato de inflación en los primeros 15 días de junio, el Banxico tendría menos incentivos para restringir nuevamente su postura monetaria.
Al igual, Monex Grupo Financiero había estimado que el mercado ya había descontado que el corto quedara en los actuales 37 millones de pesos al cierre del día, pero una inflación de 0.15 por ciento o superior aumentaría las presiones para restringir la política monetaria.
En su reporte de mercados emergentes, Credit Suisse First Boston no anticipa un cambio en el ?corto? monetario para este viernes, ante la estabilidad de las expectativas de inflación de corto y mediano plazo, aunado a que los incrementos salariales no se han visto afectados por los choques de precios.
Debido al repunte que registraron los precios en el primer trimestre, el instituto central aumentó el corto en tres ocasiones, el 20 de febrero, al incrementarlo en 29 millones de pesos; el 12 de marzo a 33 millones y el 27 de abril en cuatro millones más para alcanzar los actuales 37 millones de pesos por día.
El corto es una medida de política monetaria que asume el banco central para limitar el monto de liquidez en el mercado. Así, la autoridad obliga a los bancos comerciales a incrementar su saldo en la cuenta única que el Banxico lleva para cada uno de ellos.
De esta forma, provoca de manera indirecta un aumento en las tasas de interés y desalienta el consumo, con el objetivo final de controlar la inflación. En otros países, los bancos centrales fijan directamente las tasas de interés.
Se dispara en Torreón
La inflación en Torreón en la primera quincena de junio fue superior al promedio nacional, al arrojar una tasa de 0.13 por ciento, mientras que nivel general los precios solo crecieron 0.09 por ciento.
En Torreón, la inflación acumulada fue de 0.79 por ciento lo que generó una anualizada de 3.55 por ciento.
El Indice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) en la primera quincena de junio de 2004 creció 0.09%, informó ayer el Banco de México (Banxico).
En un comunicado, el banco central precisó que dicho resultado se explica al haberse registrado una mayor contribución del componente subyacente a la inflación general.
Por otra parte, el subíndice no subyacente tuvo una incidencia similar en las quincenas antes referidas.
Sin embargo, al interior de éste la variación quincenal del subíndice de precios administrados tuvo una incidencia significativamente mayor, debido a los incrementos en los precios del gas doméstico, de la electricidad y de las gasolinas.
Ello fue compensado por la reducción que se observó en las cotizaciones de las frutas y verduras.
Así, en la quincena referida los genéricos con una mayor contribución a la inflación general fueron: electricidad, gas doméstico, transporte aéreo, gasolinas, vivienda propia y automóviles.
En contraste, las cotizaciones de los bienes y servicios que incidieron a la baja fueron: jitomate, huevo, servicios turísticos en paquete, chile poblano, papa y limón.
