Espectáculos Miss Universo 2025 Miss Universo Christian Nodal Julión Álvarez

Su luz no se apaga

Con diversos homenajes se celebra el centenario de Dolores del Río

Notimex

México, DF.- La actriz Dolores del Río, primera figura del cine mexicano que llegó a Hollywood, es recordada en el centenario de su nacimiento por sus célebres actuaciones en películas como María Candelaria o La Malquerida, consideradas clásicas.

La artista, quien forma parte de las luminarias mexicanas sin cuyo paso por el séptimo arte sería imposible comprender la historia del cine nacional, fue ganadora del premio Ariel por sus actuaciones en Las Abandonadas, Doña Perfecta y El Niño y la Niebla.

Nacida el tres de agosto de 1904, aunque algunas biografías sitúan su nacimiento entre 1905 y 1906, Dolores Asúnsolo y López Negrete de Martínez del Río vio la primera luz en la ciudad de Durango.

Fue hija de un director de banco, quien tuvo que abandonar México para establecerse en Estados Unidos durante la Revolución.

También fue sobrina de Don Francisco I. Madero, Del Río contó con una educación privilegiada, en escuelas de diversos países europeos, gracias a la desahogada situación económica de su padre. De ahí el porte, la delicadeza y la elegancia que le darían una personalidad característica no sólo en su vida personal, sino en su exitosa carrera artística.

A los 15 años se casó, en 1921, con el escritor Jaime Martínez del Río, hacendado de envidiable posición económica, abogado de profesión, que tenía 18 años más que ella. De hecho, fue el apellido de su marido el que utilizaría pocos años más tarde para crear su nombre artístico.

Dolores Asúnsolo frecuentaba desde pequeña los ambientes intelectuales, donde conoció al director cinematográfico estadounidense, Edwin Carewe, justamente durante una visita de cortesía que éste realizó a su domicilio.

Carewe quedó impresionado ante la belleza y personalidad arrolladora de la joven, a quien invitó a interpretar un pequeño papel en la película ?Joanna?, que dirigía en Hollywood en 1925. Y años más tarde deslumbraría asimismo al escritor estadounidense Orson Welles.

Así nació Dolores del Río en el medio, que si bien alguna vez comentó que aceptó la oferta por curiosidad, como una simple aventura para satisfacer un capricho, recibió posteriormente múltiples y apremiantes solicitudes para intervenir en sucesivas producciones cinematográficas.

Los papeles que le otorgaban, no obstante eran siempre los de una figura decorativa, en los que se destacaba su origen étnico y el carácter apasionado que se le atribuye a la mujer latina. Aún así, su éxito fue tal que se estableció en Estados Unidos y ahí permaneció desde 1925 hasta 1942.

Musa de pintores y escritores

Como todas las divas, Dolores del Río tuvo una cercanía con los grandes artistas de su época. A pesar de la distancia hollywoodense, de su ideología distinta, su belleza mexicana fue una efigie perfecta para los pintores nacionalistas y musa de escritores.

Su primer retrato lo hizo un pintor de moda en la época de su niñez, Alfredo Ramos Martínez, gracias al cual descubrió que era bella. Tenía sólo 12 años ?y sólo recuerdo que estaba muy nerviosa al posarle?.

Para el pintor Ángel Zárraga no posó para el retrato que adornaría la legación mexicana en París, por falta de tiempo. ?Con una foto basta?, le dijo él y ella le envió varias que el duranguense usó, en 1940 para esa obra, en la que aparece como una virgen roja que ampara a un obrero y un campesino, rompiendo sus grilletes.

Más tarde, Tina Modotti le hizo una fotografía en 1927, donde su expresión es serena. Sin gota de maquillaje, sólo un poco de pintura en los labios, el pelo recogido y los hombros descubiertos, sonríe mirando al infinito.

Adolfo Fito Best Maugard le hizo un retrato ?casi no me acuerdo haber posado para él?. Xavier Villaurrutia le escribió en 1956 un largo poema, titulado Todo de Nada en una de cuyas partes dice: Su prodigioso extravío/sangra de todos colores/ Para el río de Dolores/ la vida canta hacia el mar/y no parece pasar/sino entre nuevos rumores/Mira a Dolores del Río/tan fina que el lápiz da/ la atmósfera en que se va/bebiendo el viaje de un río/Tu belleza y tu talento/como quien no quiere nada,/tiene la noche estrellada/del agua para el sediento./Para Dolores del Río.../Para el río los dolores/si ya no son sino flores/para Dolores del Río (SUN-AEE).

Leer más de Espectáculos

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Espectáculos

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 102138

elsiglo.mx