EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Sujeto vestido de negro, al estilo policía, sembró el pánico la mañana de ayer entre las personas que se dan cita en el parque ubicado frente al antiguo Lienzo Charro de Torreón Jardín, cuando pistola en mano atentó contra la vida de un profesionista que practicaba sus ejercicios matutinos. Agentes ministeriales se encargan de las investigaciones respectivas.
Armando Lucero Jaramillo, agente en turno del Misterio Público de Delitos contra la Vida y la Salud Personal, mesa dos, coordinación ?B?, informó que los hechos se registraron el domingo 31 de octubre aproximadamente a las 08:10 horas, en el sitio en mención.
De acuerdo a lo que manifestó el afectado, Robinson Medinilla Ojeda, de 49 años de edad, con domicilio en el mismo sector residencial, como todas las mañanas se dirigió a temprana hora (a eso de las ocho de la mañana) al mencionado paseo público donde acostumbra trotar por espacio de varios minutos, al igual que decenas de personas más.
Apenas habían transcurrido diez minutos cuando de pronto le salió al paso un sujeto vestido de negro que llevaba lentes oscuros y gorra y botas tipo elemento de seguridad o bien agente policíaco, diciéndole con palabras altisonantes que se detuviera.
Al tiempo que le lanzó el grito de advertencia sacaba de entre sus ropas un arma de fuego tipo escuadra, lo que hizo que el profesionista que se desempeña como gerente general de la cadena de zapaterías Moderna, disminuyera la velocidad de su carrera.
Cuando estuvo lo suficientemente cerca, el sujeto de negro lanzó un cachazo hacia el rostro de Robinson pero éste logró esquivarlo aunque no del todo, pues recibió el golpe en la parte de atrás de la oreja izquierda.
Asustado por la agresión de la que era objeto, el profesionista optó por correr para ocultarse detrás de un árbol, mientras que su atacante le gritaba improperios a la vez que disparaba la pistola hacia donde se escondía.
Las fuertes detonaciones ocasionaron el temor de las demás personas que hacían ejercicio en el parque, quienes se cubrieron como podían o bien se lanzaban al piso para no ser blanco de alguna de las balas perdidas.
Cuando el solitario gatillero vio que no pudo causar más daño a Robinson, abordó una camioneta Ford F150, color rojo brillante, sin placas ni vidrios polarizados, que se hallaba estacionada ahí cerca y enfiló por la Sicomoros en dirección noroeste, dejando atrás a decenas de corredores atemorizados.
El afectado fue hasta su domicilio donde solicitó el apoyo policíaco al 060, acudiendo hasta el lugar varias unidades de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), que rastrearon el área con el objeto de localizar la camioneta roja pero todo fue inútil.
Ayer mismo, la parte afectada interpuso su formal denuncia en contra de quien resulte responsable por el atentado del que fue objeto, en tanto agentes de la Policía Ministerial realizan las pesquisas para dar con el sujeto de negro.