Agencias
LOS ÁNGELES, EU.- Si Burt Lancaster no hubiese descubierto el talento como director de Sydney Pollack, el mundo del cine se habría empobrecido sin clásicos como Los Tres Días del Cóndor, Tootsie y Africa Mía.
Con su rostro destacado y el encanto inteligente de un intelectual de Nueva York, Pollack, que el 1 de julio cumple 70 años, hizo carrera como intérprete tras sus estudios de actuación. Pero cuando el joven actor llegó a Hollywood a principios de los años 60, Lancaster lo puso en la silla de director, desde la que Pollack dio muestras de su talento en dramas románticos, comedias, westerns, thrillers, películas políticas y pequeños papeles frente a la cámara.
Con 17 años, Pollack, hijo de una familia de inmigrantes rusos, huyó del aburrido medio oeste de Estados Unidos a una escuela de actuación en Nueva York. Pronto apareció en Broadway y en la televisión.
Durante el rodaje de War Hunt, en 1962, conoció al joven actor Robert Redford, un encuentro que sería luego fundamental para su carrera como director. Con el tiempo, el que se convertiría en un gran amigo fue protagonista de siete de sus films.
Junto con Barbra Streisand, Redford fue protagonista de la romántica The Way We Were, 1973, y luego de Los Tres días del Cóndor (1975), The Electric Horseman, 1979, y en su obra más famosa, Africa Mía.
El melodrama de la Africa colonial, que reunió a una pareja de ensueño de la pantalla como Meryl Streep y Redford, le significó a Pollack en 1985 un Óscar al mejor director y el éxito mundial que tanto se merecía.
Con la comedia Tootsie, en la que Dustin Hoffman se disfraza de mujer para conseguir un papel en una teleserie, Pollack ya había tenido tres años antes un gran éxito de taquilla como productor.
Pero a la fama siguieron también muchas épocas de pausa y fracasos. La historia de amor Havana, que transcurre en el marco de la crisis en Cuba, fue destruida por la crítica, que la calificó de mala copia de Casablanca, y también el público le dio la espalda.
Con el thriller La Firma, con Tom Cruise como protagonista, logró de nuevo un éxito comercial. Un "remake" del clásico de Billy Wilder Sabrina tuvo una acogida diversa, mientras que el drama romántico Random Hearts, 1999, con Harrison Ford y Kristin Scott Thomas, fue un fracaso total.
A menudo Pollack usa las pausas como director para trabajar como productor y actor. Produjo grandes hits como El talentoso Mr. Ripley y la película sobre la guerra civil estadounidense Regreso a Cold Mountain. Stanley Kubrick lo llamó para Ojos Bien Cerrados como actor, mientras que Woody Allen le dio un papel en Maridos y Esposas. También estuvo en The Player de Robert Altman.
Su fama de irónico intelectual de Hollywood que ofrece muchas veces un entretenimiento de calidad seguramente le sirvió para uno de sus más recientes proyectos y lo convirtió en el primer director que obtiene permiso para rodar en el edificio de Naciones Unidas en Nueva York.
En el policíaco The Interpreter, Nicole Kidman encarna a una traductora de la ONU que descubre un complot de asesinato. El crítico actor Sean Penn será un agente del FBI, en una película que tras cinco años de pausa como director se espera con entusiasmo.
