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LA HABANA, Cuba.- El caso Ahumada amenaza con convertirse en una nueva espada de Damocles que penda sobre las relaciones bilaterales de México y Cuba.
Ayer, a casi una semana después del arresto de Carlos Ahumada en La Habana, la Fiscalía General de la República comunicó que ha impuesto la medida cautelar de prisión provisional para el propietario del Grupo Quart. La nota de la Fiscalía, de marcado tono político y en la que no se especifica en qué cárcel se encuentra el empresario, asegura que el caso pone en riesgo la seguridad del Estado cubano.
A pesar de que el comunicado, firmado por el fiscal Luis Lorenzo Palenzuela Páez, califica el asunto como “delicado” y de “incuestionable connotación política”, el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, insistió ayer en que la resolución del caso no se verá influenciada por la posición que adopte México sobre Cuba en la votación de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas, que se celebrará dentro de diez días en Ginebra.
“Cuba jamás usaría ese tema como pieza de cambio, como método de chantaje. El caso Ahumada no tiene absolutamente nada que ver con Ginebra”, manifestó Pérez Roque durante la inauguración de una exposición fotográfica sobre los Derechos Humanos en Cuba.
En el escrito difundido por la Fiscalía, llama la atención la trascendencia política que la isla otorga a la captura de Ahumada, una relevancia que no se ha visto acompañada por la transparencia informativa.
Para el fiscal, el caso “pone en riesgo la seguridad del Estado cubano, en una coyuntura especialmente peligrosa para el país”.
El magistrado basa sus temores en las “permanentes e insidiosas campañas de desinformación dirigidas a confundir a la opinión pública internacional (...) mediante repetidas calumnias que intentan presentarlo (al país) como lugar de refugio de delincuentes, vincularlo con graves delitos transnacionales o involucrarlo en asuntos internos de otros Estados con el objetivo de dañar sus relaciones con éstos”.
El escrito de la Fiscalía también sugiere que la estancia de Ahumada en Cuba no va a ser breve: “La gravedad y complejidad de los hechos hacen aconsejable evitar la evasión del mismo y demandan una investigación responsable y cuidadosa.
que permita reunir todos los elementos de juicio necesarios sobre los daños ocasionados a nuestro país”..
