Los dos primeros de la tabla general están a 45 minutos de quedar fuera de la postemporada.
VERACRUZ, VER.- Luego de la inesperada derrota que sufrió a mitad de semana 3-0, el equipo Veracruz intentará reponerse para avanzar a las semifinales cuando este sábado reciba a Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Tiburones Rojos requiere de empatar el marcador global para conseguir su objetivo de instalarse en la siguiente ronda en el encuentro previsto para las 19:00 horas en el estadio Luis "Pirata" Fuente, algo que se antoja difícil por la calidad del rival.
El conjunto jarocho, que terminó de superlíder el torneo regular, está a un paso de continuar la "maldición" de quedar eliminado como le ha ocurrido a la mayoría de los equipos que terminan en la cima general, tal es el caso más reciente de Jaguares de Chiapas.
UNAM por su parte llega a este compromiso con la confianza de dar el golpe final a las aspiraciones del superlíder de clasificar a la siguiente ronda.
Además de que daría un paso importante para continuar con la defensa de su título y de paso, afianzar sus aspiraciones de poder conseguir el bicampeonato, algo que no se ha conseguido desde que se implementaron los torneos cortos en 1996.
El conjunto que dirige Wilson Graniolatti tiene la obligación de salir desde el silbatazo inicial a intentar igualar el marcador global que le permita instalarse en semifinales, pero deberá tener cuidado con Pumas que maneja muy bien el contragolpe. Por parte de ambos equipos se espera que para este importante compromiso puedan contar con un buen arbitraje que no influya para ninguno de los dos lados. Pumas envió ya su inconformidad a la Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) tras la labor del silbante Germán Arredondo, quien en el juego de ida expulsó al delantero boliviano Joaquín Botero por una confusión que se originó en la banca del cuadro campeón del futbol mexicano.