NUEVA YORK, EU, (EFE).Los que llenaron las salas donde se proyectó la cinta chilena "B-Happy" en su estreno en Nueva York se llevaron una sorpresa cuando, al final de la cinta, apareció entre el público su protagonista, Manuela Martelli.
Una gran ovación recibió entonces a la pequeña Manuela, que en éste, su primer papel en el cine, da vida a Kathy, protagonista de la cinta de Gonzalo Justiniano que se presenta esta semana en el marco del festival New Directors/New Films.
Manuela se confesó feliz por la recepción del público y por la posibilidad de estar por primera vez en Nueva York.
Justiniano cuenta con orgullo que el éxito de la cinta ha llevado a los organizadores del festival (el Lincoln Center y el Museo de Arte Moderno) a pedirles una función extra, y que ya se le han acercado algunos distribuidores interesados en llevar al cinta a las salas comerciales de EEUU.
La buena recepción del filme se ha extendido también a la crítica, como quedó demostrado con la favorable nota puesta por el especialista en cine del diario "The New York Times" Elvis Mitchell.
Mitchell compara el rostro de Martelli con los retratos del artista español Francisco Goya y destaca su presencia escénica, el estoicismo de su personaje y la efectividad de la puesta en escena.
Una de las características de este festival es la cercanía que existe entre los artistas y el público, pues al inicio de cada función el director o un miembro del elenco presenta la cinta y tras la proyección, responde a las preguntas de los asistentes.
Justiniano prefirió ser él quien presente su película y esperar al final para introducir, en medio de la sorpresa y los sonoros aplausos de público, a Martelli y a Felipe Ríos, actor que da vida a Danilo, hermano de Kathy.
"B-Happy" cuenta la historia de una niña que pese a las graves dificultades que encuentra en su vida, no pierde nunca la esperanza ni se deja avasallar por las circunstancias.
El director explica que la historia nació de un encuentro que tuvo hace ya más de diez años con una joven que atendía un café en el norte de Chile.
"Allí había una chica que cada vez que venía a mi mesa, me contaba algo de su vida. Algunas eran cosas muy fuertes, pero ella siempre me lo contaba como si se tratara de lo más normal del mundo", recuerda el cineasta.
Justiniano aclara que el estilo de la cinta, que utiliza gran cantidad de fundidos a negro para separar las escenas, deriva del hecho de que él quería hacer un filme lo más parecido posible a la experiencia que él tuvo cuando la muchacha le contó su historia.
"Es como estar un día en casa mostrando diapositivas a tus amigos. Tú ves una foto, una escena, y recuerdas algo, un momento de la vida, y luego pasas a otra foto, a otro momento", cuenta el director.
Una de las preguntas que hizo el público tras la proyección fue si Manuela continuará en la actuación, ya que cuando filmó "B-Happy", hace dos años, estaba aún en el colegio y no tenía intenciones de convertirse en actriz.
Martelli respondió que tras dos años de estudiar arte, se decidió a estudiar también teatro; que ya ha actuado en la próxima cinta de Andrés Wood, "Machuca"; y que analiza un proyecto junto al director argentino Ezequiel Acuña.
El público reacciona entonces con nuevos aplausos, como aliviado de saber que podrá a encontrar el carisma de la pequeña actriz en nuevas películas.
Justiniano parte el miércoles a Marsella (Francia), donde se realizará una retrospectiva de su obra y Martelli se regresa a Chile, según explicó, "porque tengo que volver a clases. Ya no puedo perder más días".