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CULVER CITY, EU.- Aprovechando la oscuridad, Tobey Maguire tratará de pasar inadvertido, medio disfrazado, para ver cómo los aficionados se vuelven locos con la segunda parte de Spider-Man, el Hombre Araña.
Con el estreno de El Hombre-Araña 2 el miércoles en Estados Unidos, Maguire quiere ver su propia película rodeado del público, cuando centenares de miles de personas abarroten las salas para ver al famoso superhéroe columpiarse por los rascacielos de Manhattan.
“Es emocionante. Iré una noche. Es evidente que uno quiere estar cuando los fans estén enloquecidos durante la película, ahí es cuando es divertido, atrapar esa energía”, dijo el actor de 29 años. La estrella de Seabiscuit y Pleasantville dice que no será su primera asistencia el cine de incógnito.
“Lo he hecho varias veces. Voy y miro 15 minutos de la película en dos o tres teatros, sólo para palpar las sensaciones de la audiencia y obtener una reacción inmediata”.
Claro que a uno le asalta la duda de qué tan peligroso podría ser que lo descubrieran, ya que seguramente será una de las caras del verano.
“Todo estará bien”, respondió Maguire. “Me pondré un sombrero, esperaré a que esté bien oscuro, me quedaré ahí diez minutos y luego me iré. Nunca sabrán”.
Quizás no parezca mucho, pero es un acto heroico para un actor con cara de niño que tiene reputación de ser extremadamente tímido y retraído cuando siente la presión de ser el centro de las miradas.
Hace unos días, en una exhibición de El Hombre-Araña 2 para la prensa en Los Ángeles, Maguire esperó a que se apagaran las luces para poder sentarse sin ser visto.
Tobey Maguire asegura que en ningún momento pensó en romper el compromiso que tenía con los productores y el director de Spider-Man 2, tal como lo reportaron diarios y revistas de todo el país varios meses antes de que se concretara su participación en la película.
El protagonista de la cinta habló acerca de tan controversial asunto y lo hizo con la misma actitud genuina y sencilla que tuvo en ocasiones anteriores.
“Todos los rumores que se generaron alrededor de mi supuesta enfermedad fueron hechos por la prensa y tuvieron sólo un 30% de fundamento”, explicó Tobey tranquilamente.
“Hubo quienes dijeron que yo estaba utilizando mis problemas de salud para conseguir un mejor y más ventajoso contrato económico con los productores de la película, pero nada de eso era cierto. Hubiera sido muy poco profesional de mi parte tratar de aprovecharme de una situación tan delicada. Yo sabía que los medios impresos de todo el país estaban fabricando esas historias para aumentar su circulación. Eso ocurre todos los días en este negocio. Por ello les dije a mis padres que no hicieran caso a lo que estaba sucediendo”.
“Cuando mi doctor les dijo que no tenía ningún problema físico grave, ellos quedaron muy tranquilos. Al siguiente día yo mismo hablé con mi abogado y mi agente para que dijeran a los productores de Spider-Man que estaba listo para firmar el contrato y empezar a filmar tan pronto como fuera posible. Después, los rumores fueron desapareciendo así como aparecieron, hasta que ya nadie se acordó que hubo un momento en el que yo estuve enfermo de la espalda”.
Héroe, a pesar de todo
En la segunda parte de la serie de Spider-Man -que se estrenó ayer en todo el país- Peter Parker -interpretado por Tobey- sigue sin acostumbrarse a ser un héroe de tiempo completo y le preocupa saber que lleva sobre los hombros la responsabilidad de salvar a la humanidad del acoso de todo tipo de criminales y delincuentes.
“En Spider-Man 2 Peter tiene que enfrentar un dilema muy complejo”, explicó Tobey. “Y no sabe en realidad cómo resolverlo. Al mismo tiempo que reconoce lo grandes que son los fabulosos poderes que tiene, Peter piensa que le gustaría ser un muchacho como cualquier otro, pero no puede ver cumplida esa aspiración tan personal porque ya tiene un destino perfectamente marcado”.
“Antes de comenzar el rodaje, (el director) Sam Raimi y yo tuvimos varias reuniones para analizar lo que pasaba con Peter. Durante esas pláticas, él me preguntó más de una vez qué pensaba yo acerca del conflicto al que iba a enfrentarse (Spider-Man) en esta película. Después de analizar la situación desde diferentes puntos de vista, comprendí que se trataba de un problema muy serio.
“A partir de ese momento sentí una mayor identificación con Peter, quizá porque pude darme cuenta de cuán grande es el sentimiento de aislamiento y soledad que le afecta. Supongo que eso mismo ocurre con algunos otros (héroes) mitológicos, especialmente con aquellos que tienen una personalidad oculta y que por motivos de seguridad no pueden revelársela a otras personas”.
Según Tobey, los artistas de cine que llegan a ser populares y famosos enfrentan dificultades similares a las de ciertos superhéroes, especialmente los que tienen una doble identidad.
“Todos nosotros elegimos la vida que deseamos llevar, por eso no debemos quejarnos de lo que nos pasa”, dijo Tobey.
“Ser artista de cine muchas veces no es algo sencillo. Aunque no dejamos de ser igual que otras personas, somos al mismo tiempo muy diferentes. Muchas veces nos cuesta entender esto y por eso pensamos que nos gustaría volver a ser igual de ‘normales’ que otros individuos, pero eso ya no puede ser posible. Hemos elegido un destino al que difícilmente podríamos renunciar. Peter Parker no puede vivir tranquilo porque siente que todavía le cuesta tomar esa decisión”.
“En Spider-Man 2 se ve obligado por las circunstancias a comprender que es un superhéroe a pesar de todo, y que tendrá que vivir ligado a esa verdad, con todas las dificultades que eso representa”.
Los actores más afortunados
Satisfecho por la forma en que fue recibida la primera cinta de Spider-Man dentro y fuera de Estados Unidos, Tobey considera que no fueron los espectaculares efectos especiales los que definieron semejante éxito.
“Pienso que fue una combinación de muchos factores técnicos y artísticos la que hizo que nuestra película se volviera tan popular en las taquillas de los cines”, señalo Tobey con una simple sonrisa.
“Yo sólo fui un elemento más entre muchos otros que se utilizaron para poner en las pantallas de los cines a Spider-Man, y estoy muy agradecido con los productores por la oportunidad que me dieron de interpretar a alguien tan fabuloso como él. Creo que el verdadero mérito de todo lo que pasó con nuestra primera película le corresponde a Sam Raimi, por la visión que tuvo para darle más importancia al drama que vive Peter Parker que a los efectos especiales que lo transforman en Spider-Man”.
“Tal vez otro director hubiera hecho algo diferente”, añadió Tobey. “Pero nunca algo mejor que lo realizado por Sam. Durante el tiempo que estuvimos filmando Spider-Man 2 tuve la oportunidad de ver en más de una ocasión nuestra película anterior, y la disfruté como si nunca la hubiera visto antes. Lo que me gustó más fue el equilibrio que hay entre las escenas de acción y aventura y aquellas donde el drama envuelve a los personajes”.
“Pienso que en Spider-Man 2 este equilibrio se expresa con una mayor fuerza dramática y un poder visual pocas veces alcanzados por el cine de nuestro tiempo. Quienes han podido ver Spider-Man 2 entienden por qué se considera en Hollywood a Sam Raimi como un tipo genial. Yo, junto con todos mis compañeros, entre los que ocupa un lugar preferente Kirsten Dunst, sentimos que somos los actores más afortunados del mundo por una razón muy simple: no siempre se tiene la suerte de ser dirigidos por alguien como él.
“Por ahora, lo único que nos queda hacer es esperar a que Sam Raimi nos llame para empezar a trabajar en la producción de Spider-Man 3, película en la que seguramente podré consumar mi primera relación amorosa”.
