AGENCIAS
BOSTON, EU.- Aguanieve, nieve y lluvia helada cayeron sobre la costa este de Estados Unidos ayer, dejando sin electricidad a miles de residentes, miles de vehículos varados en las carreteras y causando demoras en los aeropuertos.
En Carolina del Norte, al menos dos personas murieron por el frío. En el Estado de Virginia ayer cayeron al menos 35 centímetros de nieve, y en Massachussetts 46, aunque el Servicio Meteorológico Nacional vaticinó que aquí las nevadas podrían alcanzar los 51 centímetros.
En el extremo más oriental de Long Island, en Nueva York, cayeron unos 25 centímetros de nieve.
Las nevadas hicieron que sólo una de las pistas del Aeropuerto Internacional Logan de Boston pudiera funcionar hasta que una segunda fue abierta en las últimas horas de la mañana.
Esa situación causó “importantes” demoras de vuelos, expresó el portavoz del aeropuerto, Phil Orlandella.
El Aeropuerto T.F. Green de Warwick tenía demoras de vuelos después de cerrar el domingo en la noche para que se limpiaran las pistas.
La nieve estuvo acompañada por fuertes vientos, y unos 22 mil clientes se quedaron sin suministro eléctrico. La mayoría de ellos lo recuperaron al finalizar la mañana, según las autoridades. En Nueva Inglaterra también se registraron algunos apagones.
La combinación de viento, lluvia helada y nieve azotó a partes de las Carolinas el domingo, derribando árboles y tendidos eléctricos. Unos dos mil 100 clientes aún estaban sin electricidad ayer en Carolina del Norte, menos que los 14 mil del domingo.
En Carolina del Sur, las casas y negocios sin electricidad llegaron a ser 16 mil el domingo, pero en la mañana de ayer sólo cinco mil quedaban a oscuras.
Los vehículos comenzaron a transitar ayer a la mañana por la carretera interestatal 95 en el este de Carolina del Norte, después que el hielo y más de 15 centímetros de nieve varó a los automovilistas.
Mientras tanto, dos de las principales aerolíneas de Estados Unidos hacen grandes esfuerzos por normalizar sus vuelos y la entrega de montañas de maletas tras la cancelación de al menos mil 500 despegues durante el pasado fin de semana, en plena Navidad.
La aerolínea Comair, una subsidiaria de Delta Airlines, canceló el 25 de diciembre mil 100 vuelos después que el sistema informático que asigna las tripulaciones, sobrecargado por los retrasos de los últimos días, dejó de funcionar en plena Navidad.
También a nivel internacional han habido quejas contra Delta, que ha sufrido retrasos de hasta cinco días en la entrega del equipaje de cada vuelo cotidiano a El Salvador, lo cual ha sido atribuido al gran número de viajeros con motivo de las festividades.
Fuentes cercanas a Comair dijeron ayer que, pese a los esfuerzos que se llevan a cabo y a la asignación de personal adicional para atender a los miles de viajeros y su equipaje, no normalizará su servicio hasta mañana miércoles.
Comair realizó 172 vuelos el domingo, en el marco de sus esfuerzos por superar las dificultades creadas por el exceso de pasajeros y sus equipajes en los aeropuertos.
Un portavoz de Comair, Nick Miller, dijo ayer en Cincinnati, donde tiene su sede, que la empresa podría volver a operar de forma normal posiblemente el miércoles, para lo cual se hacen esfuerzos extraordinarios.
Miller indicó que las cancelaciones del fin de semana afectaron a unos 30 mil viajeros en 118 ciudades.
Por su parte, US Airways canceló 376 vuelos durante el fin de semana debido a problemas con el mal tiempo el jueves y a una gran cantidad de empleados, sobre todo trabajadores de los servicios de equipajes y asistentes de vuelo, que no fueron a trabajar por estar enfermos.
Los problemas laborales de US Airways, que ha reducido drásticamente el salario y los beneficios de sus trabajadores, pudo influir en el inusual número empleados que se declararon enfermos.
Los problemas de equipaje afectaron especialmente a los aeropuertos de Filadelfia y Charlotte, dos de los centros de operaciones regionales de US Airways.
El secretario de Transporte de EU, Norman Mineta, dijo a través de un portavoz, que le preocupaban los problemas ocurridos e instó a las aerolíneas ha adoptar medidas para superar la situación.
Este fin de semana se calcula que unos 62 millones de personas viajaron aprovechando el viernes festivo de Nochebuena y la Navidad, pero buena parte del país ha estado bajo una fuerte tormenta de nieve que dejó, por lo menos 17 personas muertas en accidentes automovilísticos.